Plaza de la revolución

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miércoles, 5 de marzo de 2014

Juan Gualberto Gómez una joya de la Patria


Por Armando Fernández Martí

Santiago de Cuba, 5 mar.— Hoy 5 de marzo se cumplen 81 años del fallecimiento en La Habana de Juan Gualberto Gómez, a quien José Martí llamó "una joya de la patria", y que fue uno de esos hombres que mostraron su lealtad a la Revolución martiana hasta sus últimas consecuencias.
Nacido en Sabanilla, Matanzas, el 12 de julio de 1854, de padres esclavos, Juan Gualberto tuvo sus primeras inquietudes revolucionarias durante la primera guerra
independentista, siendo un gran admirador de los hermanos Maceo, que antepusieron el deber a los prejuicios raciales existentes entonces.

Durante el período de la Tregua Fecunda, como denominara Martí a los años que mediaron entre las dos guerras, Juan Gualberto desempeñó una gran actividad revolucionaria y periodística, que le hicieron ganar la confianza de José Martí.

Juan Gualberto apoyo al apóstol en la creación del Partido Revolucionario Cubano en 1892, al considerar que la organización constituía un eficaz medio para el principal objetivo propuesto: la unidad de todos los cubanos en la lucha por la independencia.

Es por eso que al crearse el Partido Revolucionario Cubano Martí nombró a Juan Gualberto como su representante personal y del Partido en Cuba, desarrollando una brillante campaña independentista en la isla y en los preparativos para el reinicio de la guerra.

Fue Juan Gualberto Gómez, quien el 29 de enero de 1895 recibió de José martí la orden de alzamiento y la transmitió rápidamente a los jefes complotados, escogiéndose para la asonada la fecha del 24 de febrero de ese propio año.

Después de la muerte de Martí, Gómez prosiguió su labor partidista y terminada la guerra y disuelto el Partido por el sustituto del apóstol, Tomás Estrada Palma, Juan Gualberto formó parte de la Asamblea Constituyente que elaboró la Constitución de 1901 para la República que nacería el 20 de mayo de 1902.

Juan Gualberto Gómez fue el más firme opositor a la Enmienda Platt impuesta por los interventores norteamericanos a la isla para concederle la independencia, haciendo prevalecer las ideas independentistas y el ideario martiano en la constituyente y denunciando el carácter anexionista de quien era el favorito de los yanquis para la Presidencia de la isla, Tomás Estrada Palma.

Este insigne patriota falleció un día como hoy 5 de marzo pero de 1933 a los 80 años de edad. Aquel hijo de esclavos había conquistado un sitio venerable en el altar de la patria que lo recuerda hoy como José Martí al decir: "El cariño más tierno y cabal que pueda sentir hombre por el hombre"

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