Plaza de la revolución

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lunes, 2 de diciembre de 2013

Pepito Tey, uno de los más valerosos hijos de Santiago de Cuba

Por Margarita Piedra Cesar

Hoy 2 de diciembre se cumplen 81 años del natalicio de Pepito Tey, uno de los más valerosos hijos de Santiago de Cuba.

José Tey Sanint-Blancard, llamado cariñosamente Pepito, quien naciera en la ciudad de Santiago de Cuba  el 2 de diciembre de 1932, trasladándose posteriormente con la familia a Santa Clara, donde comenzó sus estudios primarios que culminaría después en Camagüey y terminándolos en el Colegio La Salle de Santiago de Cuba, donde también cursó la Escuela Superior para ingresar en la Escuela Normal para maestros de Oriente, graduándose en MIL 953.

En la Normal Pepito fue condiscípulo de Frank País García y ambos fueron contrincantes en las elecciones para la presidencia de la Asociación de Estudiantes que ganó Frank, aunque Pepito le brindó todo su apoyo y colaboración para las tereas a desarrollar lo que estrechó más los lazos de amistad entre ellos y su condiciones de revolucionarios.

Al producirse el golpe de Estado del 10 de marzo de 1952 por Fulgencio Batista, Pepito Tey creó en Santiago de Cuba el Directorio Estudiantil Revolucionario, período en el cual guardó prisión por sus actividades contra el tirano además de asistir a distintos Congresos estudiantiles en los cuales representó a los normalistas. Después del asalto al Cuartel Moncada, junto a Frank País José

Tey redobló sus esfuerzos para crear una organización revolucionaria con todos los que estuvieran dispuestos a luchar contra Batista.

Matriculado ya en la Universidad de Oriente como estudiante de pedagogía Pepito obtuvo la presidencia de la FEU oriental, a tiempo que junto a Frank País y Lester Rodríguez se dio a la tarea de organizar el Movimiento Revolucionario 26 de Julio, del cual llegar jefe de acción en las provincias de Oriente y Camagüey.

Tan pronto Frank regresó de la segunda entrevista con Fidel en Méjico se dedicó junto con Pepito y Lester en los preparativos para el alzamiento armado de Santiago de Cuba, labor en la que puso su máximo empeño en organizar y entrenar las fuerzas que participarían en las acciones.

En la mañana del 30 de noviembre Pepito Tey encabezó el grupo de comandos que asaltó la Estación de la Policía Nacional en la Loma del Intendente, donde cayó abatido por las balas enemigas cuando solo tenía 23 años de edad. Hoy en el 81 aniversario de su natalicio la patria lo recuerda con honor y gloria.

2 de diciembre: Día de las FAR

Por Margarita Piedra Cesar

Hoy 2 de diciembre se cumplirán 57 años de la llegada a la costa suroriental cubana, próximo a Niquero, del yate Granma con 82 expedicionarios a bordo, que a partir de ese momento comenzarían a escribir una de las más gloriosas páginas de nuestra historia porque 2 años y meses después fue derrocada la dictadura batistiana y lograda la definitiva libertad de la patria.

Ni las horas que tuvieron que marchar los expedicionarios entre los infernales manglares encontrados al desembarcar, ni la emboscada de Alegría de Pío unos días después, ni la feroz persecución desatada contra ellos por el Ejército de la dictadura, ni los crímenes cometidos contra decenas de revolucionarios en los días posteriores, pudieron menguar ni un ápice la voluntad y el espíritu de lucha de los que quedaron para cumplir la promesa hecha al pueblo de ser libres o mártires.

Ese espíritu de lucha tomó mayor trascendencia el 18 de diciembre de 1956 cuando Fidel se reencontró con un reducido grupo de 12 revolucionarios con siete armas que lo hizo exclamar: ¡Ahora si ganamos la guerra!, días más tarde el pequeño grupo ascendía a las montañas para ganar el firme de la Sierra Maestra, reiniciando así la gesta de liberación nacional que 2 años y 13 días después alcanzaba la victoria.

Al llegar a Santiago el Primero de Enero de 1959, hablando ante el pueblo de la heroica ciudad el Comandante en jefe señaló: “En lo adelante, todo será más difícil”. Y así ha sido durante los 55 años transcurridos hasta hoy, un largo y difícil camino emprendido por la revolución, que ha tenido como principal bastión al pueblo revolucionario de Cuba.

Como parte de ese pueblo están nuestras Fuerzas Armadas Revolucionarias que nacieron y se nutrieron del ejemplo y el espíritu de los expedicionarios del Granma, de los que ascendieron después a la Sierra Maestra para comenzar la lucha y de los que a lo largo de estos años han dado lo mejor de sí y hasta la vida, para que la Revolución sea la realidad soñada y anhelada por los cubanos, desde que los españoles pusieron un pie en esta isla caribeña hasta hoy en que construimos con grandes esfuerzos la patria con todos y para el  bien de todos que quería José Martí.

Nuestras gloriosas Fuerzas Armadas Revolucionarias son hoy la garantía de esos sueños, lo demostraron en la lucha contra bandidos, en las arenas de Playa Girón, durante la crisis de octubre y durante las gestas internacionalistas de Angola y Etiopía porque también Patria es Humanidad.

El Ejército Rebelde, las FAR, Fidel, Raúl y el pueblo han sido siempre y seguirán siendo una misma cosa y por eso hoy 57 años después de aquel 2 de diciembre seguimos con el mismo espíritu de victoria que navegó junto al Granma de regreso a la Patria.

Antonio Maceo y la Juventud

Por Armando Fernández Martí

Entre el 6 y el 8 de diciembre próximo será celebrado en La Habana, el Primer Seminario Juvenil Machista, en el que participarán niños, adolescentes y jóvenes cubanos y extranjeros de hasta 35 años, con el propósito de que estos se acerquen al ejemplo de la familia Maceo-Grajales y sobre todo, a la acción y el pensamiento del Titán de Bronce, al cumplirse el día 7 de este mes el aniversario 116 de su muerte en combate.

Y que bien que la juventud cubana se empeñe en conocer más sobre la vida del Lugarteniente General del Ejército Libertador, Antonio Maceo Grajales, un mulato humilde y campesino, que desde que se incorporó a la primera gesta libertadora el 14 de octubre de 1868, hasta su muerte el 7 de diciembre de 1896, nunca dejó de luchar por dos objetivos supremos: la independencia de la patria y la justicia social para su pueblo.

Al General Antonio no podemos verlo como uno de esos dioses mitológicos de la guerra e inmortal. El fue como otro hombre cualquiera, aunque si dotado de una inteligencia natural para el combate que lo convirtió en un extraordinario estratega militar y porque además, sobresalió en valentía y eso lo hizo superior a los demás soldados de su época.

Antonio Maceo se fue ganando machete en mano sus grados militares en la manigua cubana hasta escalar la más alta posición después de Máximo Gómez, que era el General en Jefe. Muy pocos generales en el mundo tuvieron un origen tan humilde y en poco tiempo alcanzaron esa categoría sin pasar por escuelas y academias y quizás, ninguno haya exhibido en su cuerpo 27 heridas en combate, como las tenía el Titán de Bronce.

Durante la primera guerra de independencia Maceo se convirtió en el arquetipo de la combatividad inquebrantable y símbolo supremo de la disciplina. Ninguno de sus soldados pudo nunca decir que el General cubano quedó atrás en la pelea y nunca nadie pudo vincularlo a ninguno de los bochornosos errores que condujeron a la firma de la trágica paz sin independencia del Pacto del Zanjón.

De ahí que un mes después de firmado el Pacto la rebeldía estalló en Mangos de Baraguá, en la célebre entrevista entre los Generales Arsenio Martínez Campos y Antonio Maceo Grajales, en representación de ambos bandos contendientes.

Y fue allí, el 15 de marzo de 1878, donde el General mulato, espejo y latido de las capas más humildes de la sociedad cubana de la época, agregó a su legendaria vida de soldado de la Patria la de defensor del interés político y revolucionario de su pueblo, donde también ocupó la vanguardia.

El General Antonio, como expresara José Martí: "tenía tanta fuerza en la mente, como en el brazo para esgrimir el machete".

Es por eso, que la juventud cubana tiene que tener también el compromiso ineludible de estudiar el pensamiento político del General Antonio Maceo, para comprender que bien podíamos llamarle el Titán de las Ideas.

57 años y el Granma navega en la historia

Por Armando Fernández Martí

Siete días demoró el Yate Granma en navegar por aguas del Atlántico y el Caribe las 1852 millas que separaban al puerto mejicano de Tuxpan de un punto cercano a Playa Las Coloradas, en la costa sur oriental cubana, adonde arribó el 2 de diciembre de 1956.

Para los 82 expedicionarios que venían a bordo de la embarcación fueron aquellos, siete días de numerosas vicisitudes y la incertidumbre de ser descubiertos por buques o aviones de la dictadura cubana y ser hundidos en pleno océano.

Por eso, la llegada a la costa y el desembarco fueron momentos de gran júbilo. Sin embargo, apenas unos minutos después la alegría se perdió cuando comenzaron a internarse en la ciénaga y los gigantescos manglares del lugar, que convirtieron a aquellos 82 hombres en “un ejército de sombras y fantasmas”, como lo describiera el Che años después.

Tal vez en esos momentos algunos perdieron a fe y la causa que habían emprendido, porque circunstancias así aflojan los espíritus y restan voluntades. Más la mayoría absoluta tuco confianza que su sacrificio no era en vano y lo demostraron días después, cuando fueron sorprendidos en una emboscada en Alegría de Pío y entre las balas y el fuego se escuchó un grito: ¡Aquí no se rinde nadie!

De la estirpe de esos 82 expedicionarios surgió el glorioso Ejército Rebelde, iniciador de la guerra de liberación nacional forjado en las más difíciles circunstancias y que en tan solo dos años y un mes después derrotaron a un ejército profesional dotado de los más modernos medios de combate, alcanzando la victoria final de la Revolución.

El Ejército Rebelde se convirtió así en un ejército de todo el pueblo y con ello en las gloriosas Fuerzas Armadas Revolucionarias de Cuba, continuadora de aquellos hombres que le dieron vida como los del Moncada, del Granma y de la Sierra y combatientes como Camilo, el Che, Almeida, Raúl y Fidel.

Por eso desde aquel 2 de diciembre de 1956, hace hoy 57 años, el Granma y las FAR andan juntos de la mano en la historia