Palma Soriano, Santiago de Cuba, 7 nov.— Cuando se tiene amor por la labor que se realiza los resultados siempre son los mejores. Así nos demuestra el ejemplo de Vilma Bisset, trabajadora de apoyo a la docencia en la escuela primaria Salvador PascuaL, del Consejo Popular Dos Ríos.
Se desempeña como auxiliar general de
servicios después de haber sido del equipo Cuba juvenil de baloncesto
por los años 80. Para su colectivo es ejemplo de consagración, así nos
comenta la Master en Ciencias de la Educación, "Inalvis Bring Coello,
Directora de la escuela, Vilma es una trabajadora muy consagrada,
siempre está dispuesta a realizar cualquier tarea que se le asigne,
junto a las otras auxiliares tiene un proyecto socio productivo donde
confeccionan tapas para los cestos de las aulas, las tasas sanitarias,
alfombras, entre otros objetos útiles. Ella es la responsable de
adornar la escuela para fechas significativas, como los actos de inicio
y final de curso, para el 4 de abril y la jornada del educador. Su área
siempre está limpia y bien cuidada por lo que su evaluación en el
trabajo es de un desempeño laboral superior".
Sus 20 años en el sector de educación han transcurrido en este centro, nos comenta Vilma Bisset que ama a los niños y le da mucho placer trabajar con ellos por eso se mantiene en la escuela. “Cuando termino mi trabajo ayudo a los maestros a preparar matutinos, a confeccionar medios de enseñanzas, creo coreografías tanto patrióticas como con música infantil y me da mucho gusto hacerlo”.
Por eso el colectivo de trabajadores ha propuesto a Vilma para recibir la Distinción por la Educación Cubana, nos dice la Directora de la escuela.
Disposición y amor por su trabajo distinguen la cotidianidad de Vilma que hace más de lo que le toca con sumo placer. Ella nos dice “ser auxiliar general no es un trabajo para avergonzarse, es una labor como otra cualquiera y a mí me gusta mucho mi trabajo, yo tengo amor por lo que hago”.
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