Plaza de la revolución

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sábado, 10 de septiembre de 2016

Vivir CIEN años y hasta mucho más…


Por Bárbara Aroche Cuadro

Santiago de Cuba, 10 sep.— La esperanza o expectativa de vida en Cuba constituye un indicador cuya importancia ha tomado significativo auge en los últimos años. En Santiago de Cuba, es frecuente el acontecimiento de personas que cumplen cien años y este es el caso de Dulce Maria Céspedes Álvarez, quien afirma sentirse feliz al llegar a esta edad.

Dulce María es privilegiada al llegar feliz a la centuria de vida. Cuántos no serán los momentos buenos y malos que habrá vivido. Aunque padece de algunas enfermedades, estas no le han impedido mantenerse radiante, con sus dos hijos, tres nietos y un bisnieto todavía goza de una calidad de vida asombrosa.

Desde sus cien años Dulce sonríe optimista a la vida, llena de ilusiones en unión de su esposo sobrepasando las bodas de oro y confiesa que ha sido muy feliz a lo largo de su existencia.

Ella recuerda etapas de todo el proceso de socialización, su niñez, adolescencia y hasta la actualidad. Dulce Maria  mantiene aun su vitalidad, mostrando  buen estado de salud físico y mental, es independiente desde lo motor y dice hacer algunos quehaceres simples del hogar.

Da gracias a la naturaleza por tener la dicha de estar rodeada de sus familiares los cuales con su amor contribuyen a que conserve el goce de la vida, disfrutando así de su siglo de existencia.

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