Por Coral Vázquez Peña
Santiago de Cuba, 18 ene.— En el Centro Nacional de Investigaciones Sismológicas de esta provincia se monitorea la actividad sísmica de toda Cuba y aun cuando la ciencia todavía no es capaz de precisar si va a ocurrir o no un terremoto se suscitan investigaciones aplicables a la reducción de las vulnerabilidades dentro y fuera del país.
En los últimos días de diciembre de 2013 y los primeros de 2014 ha habido un incremento de la actividad sísmica sobre todo en la costa sur-oriental cubana que evidencia una mayor activación en la liberación energética de la zona comparado con lo que estadísticamente se registra.
“Esto no necesariamente implica que vaya a ocurrir un terremoto fuerte pero es el resultado de un proceso normal de movimiento de las fallas tectónicas en la zona que se manifiesta en la sismicidad que estamos registrando”, dijo a TV Santiago el Máster en Ciencias Oleary González Matos, investigador del Centro Nacional de Investigaciones Sismológicas, CENAIS, de Santiago de Cuba.
En Cuba se reconocen anualmente miles de terremotos, sin embargo sentidos por la población rara vez pasan de 20 al año, de gran intensidad sólo 28 han afectado y de ellos 22 han estado asociados a la principal zona sísmica generadora que afecta al territorio cubano y que pasa por la costa sur oriental, puntualizó el especialista.
Científicamente no se ha desarrollado un método para realizar un pronóstico efectivo de este tipo de fenómeno, no obstante el Centro Nacional de Investigaciones Sismológicas tiene en operación permanente 11 estaciones donde se registran señales del territorio nacional y de países cercanos.
"Somos capaces, entonces, indicó Oleary González, de decir cómo hacer mejor las construcciones, cuál vulnerable somos a ese peligro, a que estamos expuestos, qué medidas adoptar para mitigar los efectos de un sismo de gran intensidad que pudiera afectar potencialmente a nuestro país".
De conjunto con otras instituciones científicas el Centro Nacional de Investigaciones Sismológicas de Santiago de Cuba, dirige un programa nacional para organizar y dirigir los estudios telúricos y hacer más efectivo el rol de la ciencia en función del desarrollo seguro.
"En el CENAIS se realizan muchas investigaciones en términos prácticos, por así decirlo de alguna manera, puntualizó, pero desarrollamos un conjunto de estudios teóricos dirigidos principalmente a la caracterización del fenómeno y a la propagación de las ondas" y agregó "para caracterizar lo que ocurre en el foco de los terremotos, en la estructura profunda de la tierra utilizando ondas sísmicas para conocer de qué está compuesta, cómo se va a propagar yómo se propagarían las ondas de un terremoto fuerte".
"Trabajamos con muchas instituciones, en primer lugar con la Defensa Civil a quien se mantiene siempre informada y también con otras instituciones científicas y organismos nacionales y extranjeras con las que cooperamos e intercambiamos información y realizamos estudios de manera conjunta y todo con un fin común: mitigar los efectos de un terremoto fuerte", dijo finalmente a Tvsantiago el Máster en Ciencias Oleary González Matos.
El alto nivel científico, técnico y humano alcanzado por el Centro Nacional de Investigaciones Sismológicas de Santiago de Cuba, permite reducir el riesgo ante esa amenaza natural en función de preservar la economía y la Sociedad.
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