Por Claudia González Catalán
Santiago de Cuba, 25 sep.— En la sucursal de Palmares en Santiago de Cuba, siempre hay un momento para desear cumpleaños feliz a una joven colega.
Los cubanos no renuncian a la alegría, ni a la búsqueda de soluciones para mantener el abastecimiento, la vitalidad comercial y la calidad de los servicios, dirigidos fundamentalmente al turismo.
Hasta la fecha, las más de 40 instalaciones de esta cadena extrahotelera permanecen en funcionamiento. Una combinación de racionalidad y gentileza ha sido efectiva para ahorrar 21 megawats, la mayor parte de ellos a partir de la implementación de medidas especiales, según nos comenta Andrés Reyna Ruiz, Especialista en Servicios Técnicos: “Estamos llamados a ser eficientes con el uso del transporte de carga mayormente; a ser más sensibles,
sobre todo aquellos que tenemos transporte asignado; y en el caso de las unidades que dan servicio, mantener el clima donde realmente haya necesidad”.
El apego de sus trabajadores a los recientes pronunciamientos del Presidente Miguel Díaz-Canel confirma el buen hacer, mucho más cuando se puede presumir de los valores como nación. Ese es nuestro Plan, afirmó Carlos Negret, Especialista Comercial: “Hay decisiones que son a nivel de gobierno, pero desde aquí, ¿qué nos toca? Lo de aquí es la solidaridad, la comprensión y la conciencia de la situación por la cual estamos atravesando. Y en respuesta una actitud justo a la medida de las propias agresiones”.
Una vez más los trabajadores de Palmares responden al llamado del país en estas horas decisivas, enarbolando como estandarte de continuidad, el legado de Fidel.
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