Por Bárbara Deas Trobajo
Santiago de Cuba, 14 dic.— La historia de Juan, Medina y Teresa en esta sala del hospital Dr Juan Bruno Zayas de Santiago de Cuba subrayan capítulos y valía de la medicina cubana, de profesionales que en incontables jornadas hacen de las hemodiálisis razón de vida para estos pacientes.
En Santiago de Cuba este servicio sobresale por la calidad de la asistencia, permanencia de equipos y la búsqueda de soluciones para sostenerlos en pos de suministrar sangre purificada a estas venas necesitadas, desafío al bloqueo imperialista que de cierta manera afecta su mejor funcionamiento.
Aquí se pone en práctica el reuso de los dializadores como alternativa para ahorrar recursos al país, costosos en el mundo, pero vitales para garantizar más salud y años de existencia en estos aquejados, que permanentemente pasan horas en la institución.
Más de 20 camas tiene este servicio y cuenta con un personal capacitado entre médicos, enfermeras, técnicos, electromédicos y otros que garantizan estabilidad de equipos y a la vez mejor.
En condición de paciente Juan Ramón medica explicó a tvantiago que hace seis años acude a esta sala hospitalaria, con personal de salud que les garantiza una vida mejor, Héctor Medina, por su parte dice que las máquinas forman parte de su vida porque son sus piernas, brazos, mente y cuerpo en general, que gracias a la Revolución y a la asistencia constante ha vuelto a ser Medina,
Diariamente los servicios de hemodiálisis en la provincia se distinguen por los índices de supervivencia que hoy muestran a nivel de país, y aunque estos puedan sufrir cambios por causas negativas del bloqueo económico financiero por parte de los Estado Unidos a la isla, seguirán creciendo por la esperanza y la vida de decenas de cubanos como Juan, Medina y Teresa.
No hay comentarios:
Publicar un comentario