Santiago de Cuba, 6 ago.— Una espera desesperante. Los padres lo daban entre los ocho mejores, su primer entrenador, Maroldis Lafargue Chamizo, le daba la medalla. En la casa de Maikel Masso Bavastro familiares y amigos observaban la final.
Un primer salto excelente pero fallido,
como tercero en la clasificación, le abre el camino al americano Jarrion
Lawson que logra 8,37. Y por supuesto, el vecino, superar al favorito,
el sudafricano Luvo Manyonga, quien en su segundo intento alcanza los
8,48.
La TV anuncia otro estilo. Los comentaristas Sergio Ortega y Rodolfo García, nos anuncian en salto de 8,11 de Massó en su segundo intento. Saber que lograr incluirse entre los ocho mejores del mundo ya es una tranquilidad para su familia.
Ente col y col disfrutamos la final de los 10000 m femeninos con Almaz Ayana de primera y Tirunesh Dibaba de segunda, poniendo a Kenya en el mapa mundial.
Así el Estadio Olímpico Reyna Isabel las alegrías se suceden para los cubanos con Yorgelis Rodríguez de tercera y 2964 puntos.
Y finalmente, en la pantalla vemos al indómito, sale en la arrancada elegantemente, no pisa la marca y en el aire hace la bicicleta. El salto lo coloca en la clasificación final y se estira hasta los 8,22 y pasa sexto. El jovencito de sólo 18 años tiene como mejor marca de la temporada 8,33; todavía le queda tiempo.
En el intermedio llega hasta los 8,26, a sólo una décima del tercero.Todos pensamos que llegaba a la medalla. ¿Para el último salto dejará lo mejor?
Los otros saltadores se quedaron sin fuerzas, los saltos decrecieron pero ya tenían asegurados sus lugares. Ruswhai Samai de Sudáfrica y Alexdr Menkov (atleta ruso con permiso para competir) empatan en el tercer puesto con 8,27. Al final Samai supera a su rival ruso y logra el bronce con 8,32.
En su último salta el santiaguero logra 7,98 y se queda fuera del podio, un quinto lugar memorable en su segundo mundial de mayores, alcanzado con solo 18 años de vida. ¿Qué nos puede regalar para el presente ciclo olímpico?
La TV anuncia otro estilo. Los comentaristas Sergio Ortega y Rodolfo García, nos anuncian en salto de 8,11 de Massó en su segundo intento. Saber que lograr incluirse entre los ocho mejores del mundo ya es una tranquilidad para su familia.
Ente col y col disfrutamos la final de los 10000 m femeninos con Almaz Ayana de primera y Tirunesh Dibaba de segunda, poniendo a Kenya en el mapa mundial.
Así el Estadio Olímpico Reyna Isabel las alegrías se suceden para los cubanos con Yorgelis Rodríguez de tercera y 2964 puntos.
Y finalmente, en la pantalla vemos al indómito, sale en la arrancada elegantemente, no pisa la marca y en el aire hace la bicicleta. El salto lo coloca en la clasificación final y se estira hasta los 8,22 y pasa sexto. El jovencito de sólo 18 años tiene como mejor marca de la temporada 8,33; todavía le queda tiempo.
En el intermedio llega hasta los 8,26, a sólo una décima del tercero.Todos pensamos que llegaba a la medalla. ¿Para el último salto dejará lo mejor?
Los otros saltadores se quedaron sin fuerzas, los saltos decrecieron pero ya tenían asegurados sus lugares. Ruswhai Samai de Sudáfrica y Alexdr Menkov (atleta ruso con permiso para competir) empatan en el tercer puesto con 8,27. Al final Samai supera a su rival ruso y logra el bronce con 8,32.
En su último salta el santiaguero logra 7,98 y se queda fuera del podio, un quinto lugar memorable en su segundo mundial de mayores, alcanzado con solo 18 años de vida. ¿Qué nos puede regalar para el presente ciclo olímpico?
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