Palma Soriano, Santiago de Cuba, 2 dic.— Esta zona del oriente cubano, será nuevamente la antesala para la entrada triunfante de Fidel a Santiago de Cuba, esta vez, en una despedida con dolor.
Al acercarse a territorio palmero, el
cortejo fúnebre con las cenizas de nuestro invencible Comandante Fidel
Castro, en recorrido inverso al que hiciera en la Caravana de la
Libertad, el triunfante ejército rebelde en los primeros días de 1959,
pensamos en los momentos en que para resarcir la historia, se consolidó
la entrada triunfante de Fidel a Santiago de Cuba, entrada que casi un
siglo antes había sido imposible para quienes lucharon contra el
coloniaje Español. Por la posición geográfica, de este municipio, fue la antesala de días gloriosos. El 22 de diciembre de 1958, en la finca "El Tamarindo" (Arroyo Blanco) se reunieron los jefes de los tres frentes rebeldes que combatían en la Sierra Maestra y Fidel Castro, junto a los Comandantes Juan Almeida, Raúl Castro, Vitalio Acuña, Universo Sánchez y Guillermo García entre otros, se discutió y acordó la liberación de Palma, asegurando así, la entrada a la segunda cuidad en importancia en el país, Santiago de Cuba y así consolidar la victoria.
Como paralelo histórico una vez más Fidel, ahora inerte, pero victorioso pasará, por los mismo lugares que desde Palma Soriano, lo recuerdan joven barbudo y vital dando a su pueblo la libertad robada.
Desde el poblado de “Aguacate” hasta la zona de la “Clarita”, un cordón de palmeros, como lo han hecho a lo largo del país, agitarán banderas y manos para decir adiós al Comandante invencible, este 3 de diciembre Fidel no tomará con armas la “Tierra del Cauto”, pero tomará los corazones de los agradecidos, para entrar por siempre, inmortalizado y triunfante a Santiago de Cuba.
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