Santiago de Cuba, 13 sep.— Hace algunos meses me comentaba Antonio Infante Ramírez, un viejo productor cafetalero, que no hay cosecha mala. Aseguraba que él siempre ha tenido una cosecha buena y la siguiente mucho mejor.
Claro que con esas aseveraciones quedé
un poco sorprendido por lo que nuestro dialogo, como era de esperar, se
extendió un poco más de lo previsto.
Decía Antonio que cada cual tiene un librito en materia de producción cafetalera, que no es más que lo aprendido durante largos años de experiencia por sacar adelante este renglón exportable.
Me ponía de ejemplo que él en su Unidad Básica de Producción Cooperativa (UBPC) La Silla en el municipio serrano del Tercer Frente, ha defendido año tras año el empleo de la ciencia y la técnica porque es la única vía de alcanzar resultados como pide el país.
La siembra, a través de ejes –son los hijos o vástagos de las plantas en pleno desarrollo- le ha permitido tener en las cerca de 70 hectáreas en producción plantaciones jóvenes y vigorosas con un alto potencial cafetalero.
Antonio se muestra contento con el reciente inicio de la cosecha en el Tercer Frente. Apuntaba que este año habrá más café en su UBPC y en su municipio, donde se ha extendido su método de siembra.
La cooperativa La Silla va en busca de los 250 quintales de café oro por caballería en la presente cosecha. Hay café para redondear esa cifra y de paso asegurar la punta en ese pujante movimiento productivo.
Con el resto de las estructuras productivas existentes el Tercer Frente irá por más café, esfuerzo que se traducirá en superar el medio millón de latas de café con calidad exportable para de esta forma ratificar que es el municipio mayor productor del aromático grano.
Decía Antonio que cada cual tiene un librito en materia de producción cafetalera, que no es más que lo aprendido durante largos años de experiencia por sacar adelante este renglón exportable.
Me ponía de ejemplo que él en su Unidad Básica de Producción Cooperativa (UBPC) La Silla en el municipio serrano del Tercer Frente, ha defendido año tras año el empleo de la ciencia y la técnica porque es la única vía de alcanzar resultados como pide el país.
La siembra, a través de ejes –son los hijos o vástagos de las plantas en pleno desarrollo- le ha permitido tener en las cerca de 70 hectáreas en producción plantaciones jóvenes y vigorosas con un alto potencial cafetalero.
Antonio se muestra contento con el reciente inicio de la cosecha en el Tercer Frente. Apuntaba que este año habrá más café en su UBPC y en su municipio, donde se ha extendido su método de siembra.
La cooperativa La Silla va en busca de los 250 quintales de café oro por caballería en la presente cosecha. Hay café para redondear esa cifra y de paso asegurar la punta en ese pujante movimiento productivo.
Con el resto de las estructuras productivas existentes el Tercer Frente irá por más café, esfuerzo que se traducirá en superar el medio millón de latas de café con calidad exportable para de esta forma ratificar que es el municipio mayor productor del aromático grano.
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