Plaza de la revolución

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viernes, 15 de enero de 2016

Santiaguero Pablo Lafargue, filósofo e ideólogo socialista


Pablo LafarguePor Armando Fernández Martí

Santiago de Cuba, 15 ene.— A través de sus 500 años de fundada la villa de Santiago de Cuba, muchos son los hombres y mujeres nacidos aquí que han prestigiado la ciudad, como es el caso del médico, filósofo e ideólogo socialista, Pablo Lafargue, quien fue colaborador de Carlos Marx y su yerno, al casarse con su hija Laura.

Lafargue nació en Santiago de Cuba el 15 de enero de 1842, hace hoy 174 años. Era hijo de un judío francés y una mulata haitiana que se radicaron aquí para escapar de la violencia en Haití en tiempos de la revolución anticolonialista, dedicándose al negocio de café hasta que la familia decidió marcharse a Francia.

Aunque Pablo realizó sus primeros estudios en Cuba fue en Francia donde el joven matriculó la Facultad de Medicina en la Universidad de París, pero su participación en un congreso estudiantil en Bélgica, provocó que las universidades galas le prohibieran acceder a sus aulas, por lo que tuvo que marchar a Londres donde terminó sus estudios para graduarse como médico.

En la capital inglesa Lafargue comenzó a visitar la casa de Carlos Marx enamorándose de su hija Laura con la cual formalizó relaciones en 1866. En el joven cubano, el célebre filósofo encontró no solo un yerno, sino también un colaborador inteligente y capaz que interpretó con fidelidad la obra marxista.

Pablo Lafargue escribió varios libros, entre ellos el Derecho a la Pobreza, uno de los más difundidos de la literatura socialista mundial, solo superado en ese aspecto por el Manifiesto Comunista de Carlos Marx y Federico Engels.

Pablo y LauraPablo y su esposa Laura Marx habían establecido un acuerdo mutuo de quitarse la vida cuando lo consideraran oportuno, para no causarle molestias a nadie, y así lo hicieron, suicidándose al regresar a su casa de París el 25 de noviembre de 1911, después de haber pasado una tarde placentera en un cine de la ciudad. Ambos gozaban de buena salud y se encontraban en plenas facultades físicas y mentales. Lafargue tenía entonces 69 años de edad.

Entre los que hablaron ante su tumba en la necrópolis parisiense se encontraba un exiliado ruso quien respondía al nombre de Vladimir Ilich Ulianov, conocido por el pseudónimo de Lenin, quien años después sería el creador del primer estado de obreros y campesinos del mundo: La Unión Soviética.

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