Santiago de Cuba, 26 oct.— La provincia de Santiago de Cuba se prepara para la temporada de alta turística que comienza el primero de noviembre y concluye en abril con medidas encaminadas a elevar la satisfacción de los clientes, aseguró en esta ciudad Soraya Lozano González, delegada del Ministerio de Turismo.
Debido a la situación económica que enfrenta el país, con el recrudecimiento del bloqueo de los Estados Unidos, con una fuerte incidencia en el sector, trabajan de manera estrecha con empresas proveedoras, puntualizó.
Mencionó la cárnica, alimentaria, pesquera y otras que hoy están en mejores condiciones de sustituir un grupo de productos antes importado o procedente de otros territorios del país.
Elogió su buena calidad y la posibilidad de que en las mesas buffet no falten renglones que exigen los estándares de los hoteles.
También el transporte turístico, señaló, recibió atención con la recuperación de vehículos que estaban en los talleres y, por ejemplo, Transtur logró hacerlo en el 75 por ciento, con autos para rentar y ómnibus destinados al traslado de grupos con interés en las excursiones.
Santiago de Cuba, detalló, cuenta con alrededor de mil 600 habitaciones y de esas el 99 por ciento está en orden para el alojamiento, mientras el resto recibe acciones de mantenimiento.
Esperan, expresó, el arribo de varios vuelos de turistas, lo cual será importante para la provincia y ratificó la seguridad en que los trabajadores del ramo darán una respuesta en la etapa de mayor afluencia de extranjeros.
La delegada de turismo en la provincia se refirió, además, a la labor realizada en la modalidad de naturaleza, con valores agregados, como es el incremento del senderismo en el municipio montañoso de Segundo Frente en su nuevo hotel.
Adelantó algunas novedades en la próxima temporada alta como es un producto en la reserva ecológica Siboney-Juticí, en el Parque Baconao, con el vuelo de una colonia de murciélagos, que será de sumo atractivo para los visitantes.
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