Santiago de Cuba, 16 nov.— La orientación y preparación a futuras madres, en los cuidados pre y pos natales es una de las principales misiones de la salud pública en Cuba.
En el hogar materno Armando García
alrededor de 136 gestantes aguardan el nacimiento de sus bebés con el
acompañamiento de equipos multidisciplinarios, que se dedican a realizar
actividades de capacitación a las madres en los cuidados del bebé, a
fin de optimizar la calidad de vida materno infantil.
Temas tan importantes como la planificación familiar pre-concepcional, la paternidad y maternidad responsables, la lactancia materna exclusiva hasta los seis meses de vida del neonato y las precauciones a tener en cuenta ante el posible incremento de accidentes domésticos infantiles, son abordados una vez por semana en este centro, como parte del amplio programa que desarrollan ginecólogos, psicólogos, terapeutas y pacientes. Además de realizar ejercicios físicos para facilitar el parto.
Pacientes de El caney, Boniato, El Cristo, La Maya, Guamá y Contramaestre llegan a este centro, con algunas patologías que ponen en riesgo la vida de la madre y el niño.
La anemia, la hipertensión arterial, la diabetes gestacional, el bajo peso o las obesas con ganancias exageradas de peso, y embarazos gemelares, se encuentran entre los principales riesgos prenatales más comunes en el país, por lo que desde las primeras semanas de gestación se adoptan medidas para prevenir las posibles complicaciones.
Las acciones de cuidado y prevención antes, durante y después del parto según las normas regulatorias del adecuado desencadenamiento gestacional
Durante su estancia en el hogar materno Armando García, conocido también como Centro Gallego, las madres aprenden a conocer más su organismo y enfrentar mejor este proceso que, aunque para muchas es común, para otras, es una etapa muy difícil en la que todo tipo de apoyo es necesario para lograr el bienestar de la madre y el niño.
Con más de cincuenta años, este es uno de los sitios de salud recientemente reparados donde se garantiza el confort de las pacientes.
Cuatro salas amplias, divididas en cubículos, y con un equipamiento completo para las pruebas médicas se ubican allí, donde la atención de todo el personal de salud avala el bienestar de los infantes prioridad, no solo en Santiago de Cuba, sino también en el país que procura disminuir las cifras de envejecimiento existentes hoy en el territorio nacional.
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