Santiago de Cuba, 29 ago.— El valioso legado de Emilio Bacardí Moreau como primer alcalde de Santiago de Cuba y en su condición de escritor, historiador, político e insigne patriota fue recordado hoy, en esta ciudad, en el aniversario 95 de su muerte.
Trabajadores del museo con su nombre,
primero de carácter público fundado en Cuba hace 118 años, y de la
dirección de Patrimonio Cultural depositaron ofrendas florales ante su
tumba, en el cementerio Santa Ifigenia, y en el monumento erigido por su
hija Lucía Victoria Bacardí Cape, frente a la primera institución.
En el acto de homenaje se conoció de la conmoción por su deceso en la urbe oriental, que vistió de luto y reconoció sus tantas obras benéficas y méritos, según reflejaron publicaciones de la época como El Cubano Libre.
Por iniciativa suya se crearon la Banda Municipal de Música y el Cuerpo de Bomberos, fue escalonada la calle Padre Pico, rescatada la casa natal del poeta José María Heredia, arregladas calles y escuelas, el alumbrado público y la Fiesta de la Bandera, mantenida hasta hoy cada 31 de diciembre.
Es considerada su obra cumbre el museo biblioteca, abierto el 12 de febrero de 1899 y que separó la función de esta última en una nueva institución con el nombre de su esposa Elvira Cape, debido al incremento de los exponentes.
Figuran objetos y documentos de las guerras del siglo XIX, entre esos un chaleco de José Martí, polaina y hamaca del General José Maceo, un torpedo mambí utilizado por las tropas del General Calixto García, así como también la única momia egipcia existente en Cuba, traída por Bacardí en 1912.
Igualmente, la pintura La confronta de billetes, conocida como La lista de la lotería, de José Joaquín Tejada y que fuera elogiada por Martí, y los 10 tomos originales de las Crónicas de Bacardí, que narran la vida económica, política y social santiaguera desde la colonia hasta 1902.
En octubre del 2015 el Museo Emilio Bacardí reabrió sus puertas luego de tres años en restauración, con un nuevo montaje museográfico, y una Sala de Arte como extensión, en lo que fuera siglos atrás el Club San Carlos.
En el acto de homenaje se conoció de la conmoción por su deceso en la urbe oriental, que vistió de luto y reconoció sus tantas obras benéficas y méritos, según reflejaron publicaciones de la época como El Cubano Libre.
Por iniciativa suya se crearon la Banda Municipal de Música y el Cuerpo de Bomberos, fue escalonada la calle Padre Pico, rescatada la casa natal del poeta José María Heredia, arregladas calles y escuelas, el alumbrado público y la Fiesta de la Bandera, mantenida hasta hoy cada 31 de diciembre.
Es considerada su obra cumbre el museo biblioteca, abierto el 12 de febrero de 1899 y que separó la función de esta última en una nueva institución con el nombre de su esposa Elvira Cape, debido al incremento de los exponentes.
Figuran objetos y documentos de las guerras del siglo XIX, entre esos un chaleco de José Martí, polaina y hamaca del General José Maceo, un torpedo mambí utilizado por las tropas del General Calixto García, así como también la única momia egipcia existente en Cuba, traída por Bacardí en 1912.
Igualmente, la pintura La confronta de billetes, conocida como La lista de la lotería, de José Joaquín Tejada y que fuera elogiada por Martí, y los 10 tomos originales de las Crónicas de Bacardí, que narran la vida económica, política y social santiaguera desde la colonia hasta 1902.
En octubre del 2015 el Museo Emilio Bacardí reabrió sus puertas luego de tres años en restauración, con un nuevo montaje museográfico, y una Sala de Arte como extensión, en lo que fuera siglos atrás el Club San Carlos.
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