Por Caridad Franco Vega
Santiago de Cuba, 4 mar.— En Santiago de Cuba más de 13 mil 390 infantes reciben sus
primeras lecciones en 82 círculos distribuidos por toda la provincia
los que disponen del personal calificado para atender las necesidades
educativas de los pequeños.
Algunas de estas instalaciones se han beneficiado con importantes reparaciones con lo que mejoran no solo la infraestructura.
Melani Nuñez es una niña que está en preescolar y muy alegre asegura que le gusta venir al círculo porque está muy bonito.
Solidenia Almenares es la directora del C.I Amiguitos de las FAR. Ella nos comenta que "el circulo se sometió a una reparación capital se cambió toda la marquetería, se reparó toda la instalación hidráulica, eléctrica, el enchapé de la cocina, se cambió la cubierta del techo, y se impermeabilizó".
"Hoy en día estamos satisfechos con esta reparación -continua afirmando- porque disfrutamos de mayor confort los padres, la familia están más contentos los niños también y nosotras trabajamos más cómodas. Hay que destacar que la comunidad prestó ayuda a nuestro centro pues es este círculo la instalación social más importante del barrio".
Iniciar a los más pequeños en los buenos hábitos y costumbres, descubrirle el mundo de los sonidos y los trazos, guiarlos en su desenvolvimiento independiente es misión de quienes dedican sus empeños a educar en etapas tan tempranas e importantes de la vida como la preescolar.
Cristin Shain Santiesteban es otra pequeña que encontramos en el aula de preescolar y bien dispuesta cuenta todo lo que aquí aprende, Con lenguaje fluido dice que la maestra le enseña las vocales, los trazos, las consonantes y que sabe los colores y va descubriendo las cualidades de héroes como José Martí y Fidel Castro.
Aunque la demanda está aún por encima de las posibilidades de oferta en Santiago de Cuba más de 13 mil 380 madres trabajadoras tienen a sus hijos en círculos infantiles que les garantizan seguridad y la educación integral de sus niñas y niños.
Algunas de estas instalaciones se han beneficiado con importantes reparaciones con lo que mejoran no solo la infraestructura.
Melani Nuñez es una niña que está en preescolar y muy alegre asegura que le gusta venir al círculo porque está muy bonito.
Solidenia Almenares es la directora del C.I Amiguitos de las FAR. Ella nos comenta que "el circulo se sometió a una reparación capital se cambió toda la marquetería, se reparó toda la instalación hidráulica, eléctrica, el enchapé de la cocina, se cambió la cubierta del techo, y se impermeabilizó".
"Hoy en día estamos satisfechos con esta reparación -continua afirmando- porque disfrutamos de mayor confort los padres, la familia están más contentos los niños también y nosotras trabajamos más cómodas. Hay que destacar que la comunidad prestó ayuda a nuestro centro pues es este círculo la instalación social más importante del barrio".
Iniciar a los más pequeños en los buenos hábitos y costumbres, descubrirle el mundo de los sonidos y los trazos, guiarlos en su desenvolvimiento independiente es misión de quienes dedican sus empeños a educar en etapas tan tempranas e importantes de la vida como la preescolar.
Cristin Shain Santiesteban es otra pequeña que encontramos en el aula de preescolar y bien dispuesta cuenta todo lo que aquí aprende, Con lenguaje fluido dice que la maestra le enseña las vocales, los trazos, las consonantes y que sabe los colores y va descubriendo las cualidades de héroes como José Martí y Fidel Castro.
Aunque la demanda está aún por encima de las posibilidades de oferta en Santiago de Cuba más de 13 mil 380 madres trabajadoras tienen a sus hijos en círculos infantiles que les garantizan seguridad y la educación integral de sus niñas y niños.
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