Santiago de Cuba, 10 nov.— Especialistas de la Estación Experimental Agroforestal de los municipios de Tercer Frente, en la provincia de Santiago de Cuba, y de Baracoa, en Guantánamo, crean condiciones para replantar los cultivos de café y cacao dañados en ese territorio por el huracán Matthew.
Felipe Martínez, director del centro
santiaguero, declaró a la ACN que durante tres semanas sus
investigadores colaboraron en una fase inicial para recuperar los bancos
de germoplasma y las áreas experimentales de la estación, en esa
localidad guantanamera.
Además, reforzamos la capacitación de los productores sobre tareas técnicas dirigidas a la recuperación intensiva de café en esas condiciones, por prioridades, para lo que distribuimos un video, plegables y realizamos talleres también en los municipios de Imías y Maisí, agregó.
En una segunda fase aumentaremos la producción de semillas en los viveros de Santiago de Cuba y volveremos para supervisar las acciones técnicas que van desempeñando y continuar su promoción, basados en la experiencia acumulada por nuestra estación en la agricultura de montaña, durante 37 años, acotó.
Comparado con el huracán Sandy, en 2012, Matthew entró con categoría cuatro y vientos fuertes sostenidos mayores, y luego llovió durante varios días, por lo que los daños fueron más severos, al derribar la mayoría de los árboles de sombra de Maisí y perder muchos cultivos en Baracoa, aseguró Martínez.
Pero los santiagueros logramos levantarnos y ellos también podrán, apuntó, es nuestra certeza y de alguna manera la transmitimos para ayudar a levantar el ánimo de nuestros colegas y hermanos.
Martínez destacó que con la unión de la ciencia, los técnicos y los productores locales, espera se agilicen las labores para recuperar estos cultivos exportables en una zona tan importante para la economía del país, y pueda retomarse así el plan de desarrollo del café concebido hasta 2020.
Los estragos ocasionados por el huracán Sandy en los cultivos de Santiago de Cuba y los de Matthew, así como también la intensificación y recurrencia con que suceden esos fenómenos, nos impone como científicos la necesidad de evaluar técnicas y métodos que minimicen los daños de los fuertes vientos a las plantaciones, dijo.
Además, reforzamos la capacitación de los productores sobre tareas técnicas dirigidas a la recuperación intensiva de café en esas condiciones, por prioridades, para lo que distribuimos un video, plegables y realizamos talleres también en los municipios de Imías y Maisí, agregó.
En una segunda fase aumentaremos la producción de semillas en los viveros de Santiago de Cuba y volveremos para supervisar las acciones técnicas que van desempeñando y continuar su promoción, basados en la experiencia acumulada por nuestra estación en la agricultura de montaña, durante 37 años, acotó.
Comparado con el huracán Sandy, en 2012, Matthew entró con categoría cuatro y vientos fuertes sostenidos mayores, y luego llovió durante varios días, por lo que los daños fueron más severos, al derribar la mayoría de los árboles de sombra de Maisí y perder muchos cultivos en Baracoa, aseguró Martínez.
Pero los santiagueros logramos levantarnos y ellos también podrán, apuntó, es nuestra certeza y de alguna manera la transmitimos para ayudar a levantar el ánimo de nuestros colegas y hermanos.
Martínez destacó que con la unión de la ciencia, los técnicos y los productores locales, espera se agilicen las labores para recuperar estos cultivos exportables en una zona tan importante para la economía del país, y pueda retomarse así el plan de desarrollo del café concebido hasta 2020.
Los estragos ocasionados por el huracán Sandy en los cultivos de Santiago de Cuba y los de Matthew, así como también la intensificación y recurrencia con que suceden esos fenómenos, nos impone como científicos la necesidad de evaluar técnicas y métodos que minimicen los daños de los fuertes vientos a las plantaciones, dijo.
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