Muchas fueron las expectativas creadas meses antes. La iniciativa del popular cantautor colombiano Juanes, de realizar un segundo Concierto por la Paz en la isla de Cuba, despertó el interés nacional y el ánimo de los cubanos de disfrutar de un espectáculo internacional de tal magnitud y calidad artística.
El escenario, un histórico lugar, la Plaza de la Revolución de la capital cubana. Los artistas, un elenco de lujo: quince intérpretes de España, Ecuador, Puerto Rico, Italia y Cuba. Juanes, Olga Tañón, Danny Rivera, Miguel Bosé, Víctor Manuel, Luis Eduardo Aute, Juan Fernando Velasco, Jovanotti, Amaury Pérez, Silvio Rodríguez, Orishas, Carlos Varela, X Alfonso, Yerba Buena y Los Van Van, con un espectacular cierre coreando el Chan Chan de Compay Segundo y los versos de José Martí, justo frente a su imagen.
Derroche de armonía, solidaridad y buena música disfrutaron cerca de un 1 150 000 cubanos que viajaron desde todas partes de la isla.
Quizás muchos pensaron e intentaron buscar en el concierto motivaciones políticas. Varias fueron las presiones sobre los organizadores del concierto. Lágrimas del propio Juanes y la característica decisión de la mujer de fuego, Olga Tañón, no permitieron que nada empeñara la ocasión.
Un momento donde la principal inspiración era la paz, la unidad entre todos los cubanos, no importaban sus creencias, el lugar del mundo donde estuvieran o sus aspiraciones políticas.
Veinte de septiembre, una gran multitud de blanco, canciones de todas partes, un solo idioma, un solo mensaje: la paz.
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