Por Caridad Franco Vega
Santiago de Cuba, 26 sep.— El Centro de elaboración de alimentos, encargado de la cocción diaria de más de 4 mil 500 almuerzos destinados a los seminternados y escuelas especiales de Santiago de Cuba, aplica alternativas para ahorrar combustible y garantizar que este en tiempo y con calidad el almuerzo de escolares y trabajadores.
Que de las calderas no salga el vapor habitual y estén apagadas cuando debería estarse cocinando en ellas unas 4500 raciones de almuerzo es un hecho que de problema se convirtió en solución.
En este Centro de Elaboración se cocina con diésel directo y tradicionalmente se consumen unos 9 mil litros de petróleo por mes.
Para responder a las medidas que se aplican para ahorrar combustible y no afectar el servicio aquí se tomó la decisión de utilizar esencialmente el carbón para elaborar los alimentos, se potenció el uso de gas licuado y de esta forma se sustituye así el consumo de diésel directo, así lo explica Raúl Samón, director municipal de Educación Santiago de Cuba quien agrega, que además se ha corrido el horario de los turno de trabajo. Por ejemplo ahora se entra alrededor de la una de la mañana y se labora toda la madrugada hasta que se concluye y se distribuye hacia las escuelas.
Eduardo es cocinero y se desempeña como jefe de turno, atento a cada parte del proceso, hace un alto y explica que por estos días laboran los seis cocineros en un mismo turno y cada uno es responsable de un plato.
Hoy existen en los almacenes los productos indispensables para confeccionar el menú diario lo que sin dudas es una tranquilidad.
La energía de estos hombres y mujeres es hoy salvación y garantía que aun cuando el calor importuna y el cansancio pretende rendir, la voluntad de servir bien vence cualquier adversidad.
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