Por José Raúl Castillo Argüelles
Santiago de Cuba, 27 jul.— El equipo Cuba reaccionó tras dos derrotas consecutivas y le propinó un fulminante fuera de combate a su similar de República Dominicana con pizarra de 13 carreras por 1 en ocho entradas pero previamente Puerto Rico había venido de abajo en su juego con Colombia para apuntarse una estrecha victoria de 2 anotaciones por 1 que le aseguró su quinto triunfo sin derrotas y al mismo tiempo lo convirtió en el nuevo monarca del béisbol regional.
El éxito borinqueño los colocó en posición inalcanzable con su saldo de 5-0 pues, aunque pierdan los dos juegos que les restan, ganaron los encuentros a los únicos conjuntos que les podrían dar alcance en el número de victorias y derrotas, Colombia y Cuba.
Así las cosas, cuando se dio la voz de play ball para el choque Cuba-Dominicana ya era un hecho cierto que la Mayor de las Antillas había cedido el trono del béisbol regional, al que había ascendido la representación de la Isla del Encanto.
Una vez perdido el objetivo principal en la competición centrocaribeña las metas alternativas para el abanderado cubano son lograr la mejor ubicación posible y hacerse de un boleto para los Juegos Panamericanos de Lima 2019, finalidad hacia la que dieron un paso adelante tras salir explosivamente de un frustrante letargo ofensivo al tiempo que acompañaron ese despertar con una excelente faena monticular que compartieron el granmense Lázaro Blanco y el pinareño Erly Casanova.
De la mano de bateo y pitcheo eficientes y con el servicio adicional de una pobre defensa de los rivales que saldó la jornada con cuatro pifias y cinco carreras inmerecidas para los lanzadores dominicanos la tropa que comanda Carlos Martí avanzó hacia el feliz desenlace.
Cuba tomó la delantera en la misma primera entrada al anotar una vez y así se mantuvo el juego hasta el cierre del quinto episodio cuando los dominicanos lograron emparejar la balanza.
Los abridores Lázaro Blanco y César Valdez fueron figuras de relieve a lo largo de este segmento del juego.
Fue a partir de la segunda mitad del choque cuando los cubanos lograron desequilibrar totalmente el juego, primero materializaron un ramillete de cuatro carreras en el sexto tramo y luego dieron el golpe mortal en el octavo con un aplastante racimo de ocho marcas.
Valdez explotó en la parte alta del sexto y se fue a la cueva con balance de ocho imparables y cinco carreras sucias en cinco y dos tercios de entrada de actuación.
Los relevistas dominicanos no pudieron contener el avance cubano; salvo el primero de ellos, José Valdespina (una entrada sin carreras y par de jits permitidos) y el último, Edwar Cabrera (sacó un out) los demás no pudieron cerrar las puertas del home.
Ramón García permitió dos limpias en un tercio de entrada, Luís Liria cargó con cinco inmaculadas en dos tercios de entrada y Luís Ángeles no sacó outs y cargó con una limpia.
Los mejores bateadores cubanos fueron Yurisbel Gracial (5-3, dos impulsadas, dos anotadas) y Alexander Ayala (5-3, dos impulsadas, una anotada). También destacaron en favor de la causa Yordan Manduley y Juan Torriente quienes se repartieron cuatro remolques entre ellos, a partes iguales.
Ganó Lazaro Blanco y perdió César Valdez. Erly Casanova lanzó en forma hermética el último episodio.
En la jornada, además de los triunfos de Puerto Rico y Cuba, Nicaragua doblegó a Panamá 6 carreras por 2.
Posiciones: Puerto Rico 5-0 / Colombia y Cuba 3-2 / Nicaragua, Venezuela, Panamá y Dominicana 2-3 / México 1-4.
Hoy el calendario señala los choques Cuba-Nicaragua, Panamá-Puerto Rico y México-Venezuela.
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