Santiago de Cuba, 25 sep.— Cuba importa cada año unas 8 mil toneladas de café para abastecer el mercado interno por un valor de 25 millones de dólares, por lo que los caficultores de la isla buscan las vías para producir más, sustituyendo importaciones y beneficiando con el producto cubano el crecimiento económico en un mercado cada vez más competitivo.
Con este objetivo nuestro país
implementa un programa de desarrollo cafetalero que comprende varias
etapas y cuya esencia es elevar sus exportaciones y abastecer el mercado
nacional sin tener que importar el grano.
La Empresa Agroforestal en la provincia Santiago de Cuba ejecuta este programa y se actualiza con objetivos hasta el año 2021, con ejes priorizados y proyectos cuidadosamente diseñados, que aseguran la aplicación de la ciencia, la tecnología y la innovación, que aseguren el desarrollo sostenible.
La institución promueve la capacitación sistemática y posee centros de aprendizaje, donde asisten los trabajadores a recibir talleres, cursos, entrenamientos u otra forma de superación integral que asegure una elevada calidad en la ejecución del papel que le toca a cada cual como protagonista de los planes de desarrollo.
Como parte del programa de desarrollo del cerezo se trabaja en la renovación de los cafetales, siembras nuevas y rehabilitación, sustentado en posturas de calidad resistentes a plagas, enfermedades y el clima de las zonas de montaña.
En territorio santiaguero, de anteriores cosechas se vienen observando bajos rendimientos en variedades comerciales como la arábica y su contraste con las potencialidades productivas del café robusta, lo que indica que es necesario renovar las áreas cafetaleras de forma escalonada.
En las montañas del municipio de Contramaestre por ejemplo, el protagonismo del café como cultivo esencial se aprecia ya, a un año de iniciado el programa de renovación, con el incremento de hasta 350 toneladas del cerezo por hectárea, de un plan de 500.
Por otra parte en el municipio San Luis en el actual año de 248 hectáreas, se renovaron 152 de café arábigo y 96 de robusta, pues la intención también es incrementar la variedad arábigo, ya que antaño San Luis era un verdadero emporio cafetalero.
Según informó a medios locales Juan Manuel Socarás, director de la Empresa Agroforestal en este territorio, una de las principales tareas es renovar las plantaciones, mayoritariamente envejecidas, y buscar además áreas nuevas para crecer en la extensión de las tierras agrícolas dedicadas a este cultivo con el objetivo de obtener un mayor volumen de granos.
Con la mirada puesta en elevar el rendimiento cafetalero, en Santiago de Cuba se le brinda vital importancia a la cosecha cafetalera, poniendo todo el esfuerzo en elevar los resultados y la calidad del producto, históricamente ligado a las montañas de la provincia.
Escrito por Roque Vila y publicado en el Sierra Maestra.
La Empresa Agroforestal en la provincia Santiago de Cuba ejecuta este programa y se actualiza con objetivos hasta el año 2021, con ejes priorizados y proyectos cuidadosamente diseñados, que aseguran la aplicación de la ciencia, la tecnología y la innovación, que aseguren el desarrollo sostenible.
La institución promueve la capacitación sistemática y posee centros de aprendizaje, donde asisten los trabajadores a recibir talleres, cursos, entrenamientos u otra forma de superación integral que asegure una elevada calidad en la ejecución del papel que le toca a cada cual como protagonista de los planes de desarrollo.
Como parte del programa de desarrollo del cerezo se trabaja en la renovación de los cafetales, siembras nuevas y rehabilitación, sustentado en posturas de calidad resistentes a plagas, enfermedades y el clima de las zonas de montaña.
En territorio santiaguero, de anteriores cosechas se vienen observando bajos rendimientos en variedades comerciales como la arábica y su contraste con las potencialidades productivas del café robusta, lo que indica que es necesario renovar las áreas cafetaleras de forma escalonada.
En las montañas del municipio de Contramaestre por ejemplo, el protagonismo del café como cultivo esencial se aprecia ya, a un año de iniciado el programa de renovación, con el incremento de hasta 350 toneladas del cerezo por hectárea, de un plan de 500.
Por otra parte en el municipio San Luis en el actual año de 248 hectáreas, se renovaron 152 de café arábigo y 96 de robusta, pues la intención también es incrementar la variedad arábigo, ya que antaño San Luis era un verdadero emporio cafetalero.
Según informó a medios locales Juan Manuel Socarás, director de la Empresa Agroforestal en este territorio, una de las principales tareas es renovar las plantaciones, mayoritariamente envejecidas, y buscar además áreas nuevas para crecer en la extensión de las tierras agrícolas dedicadas a este cultivo con el objetivo de obtener un mayor volumen de granos.
Con la mirada puesta en elevar el rendimiento cafetalero, en Santiago de Cuba se le brinda vital importancia a la cosecha cafetalera, poniendo todo el esfuerzo en elevar los resultados y la calidad del producto, históricamente ligado a las montañas de la provincia.
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