Santiago de Cuba, 17 ene.— Un moderno equipamiento agrícola y de alta eficiencia beneficia la siembra de frijol en la provincia de Santiago de Cuba, una de las principales prioridades en la producción de alimentos y en la sustitución de importaciones.
La nueva tecnología, concentrada en la
Empresa Laguna Blanca del municipio de Contramaestre, mayor polo
productivo del territorio santiaguero, ofrece servicios a 15 estructuras
agrícolas entre unidades básicas, cooperativas del sector campesino y
una granja estatal.
Cosechadoras, tractores y carretas, fumigadoras integrales y de arrastre respaldan la obtención de frijol y maíz con sistemas de riego, como las 29 máquinas de pivote central que además favorecen a los cultivos de ciclo corto y frutales.
Roberto Hardy, director de la entidad, explicó que los mejores precios y tecnologías estimularon la producción y poder suplir la materia prima para alimento de la masa porcina, así como la entrega de frijoles para la canasta familiar.
Agregó que la explotación de la maquinaria tiene mucha aceptación en la base productiva porque humaniza el trabajo en la cosecha, mejora la eficiencia y reduce considerablemente el costo de la recolección, comparado con los métodos utilizados anteriormente.
Ahora mismo, luego de rotar la tierra con sembradíos de maíz, vuelven a plantar frijol, lo cual contribuirá a disminuir la adquisición de granos en el exterior, precisó.
Para el presente año los productores responsables con la alimentación de la población citadina obtendrán más toneladas (t) de frijol, por las 500 h sembradas con todos los recursos y condiciones al cierre del 2016, cifra superior a la pasada.
Este avance responde a las mejorías necesarias en el campo, planteadas en los Lineamientos de la Política Económica y Social del Partido y la Revolución.
Como resultado, hoy crecen crecen las siembras, favorecidas por el funcionamiento de tractores y máquinas sembradoras, el riego y relaciones con otras entidades que enriquecen la producción.
En la Unidad Básica de Producción Cooperativa (UBPC) Juventud del Futuro sembraron 78 h de la especie Buenaventura, Delicia y Negro, y el administrador Agustín Godoy argumentó que la esencia radica en hacerlo todo en el primer ciclo, para garantizar el desarrollo del cultivo.
Unos 750 usufructuarios ocupan casi cuatro mil h de la Empresa Laguna Blanca, como fuerza que también produce; ellos se dedicaron con empeño a ese cultivo porque, además de que la tierra lo admite, es una necesidad para el país.
Cosechadoras, tractores y carretas, fumigadoras integrales y de arrastre respaldan la obtención de frijol y maíz con sistemas de riego, como las 29 máquinas de pivote central que además favorecen a los cultivos de ciclo corto y frutales.
Roberto Hardy, director de la entidad, explicó que los mejores precios y tecnologías estimularon la producción y poder suplir la materia prima para alimento de la masa porcina, así como la entrega de frijoles para la canasta familiar.
Agregó que la explotación de la maquinaria tiene mucha aceptación en la base productiva porque humaniza el trabajo en la cosecha, mejora la eficiencia y reduce considerablemente el costo de la recolección, comparado con los métodos utilizados anteriormente.
Ahora mismo, luego de rotar la tierra con sembradíos de maíz, vuelven a plantar frijol, lo cual contribuirá a disminuir la adquisición de granos en el exterior, precisó.
Para el presente año los productores responsables con la alimentación de la población citadina obtendrán más toneladas (t) de frijol, por las 500 h sembradas con todos los recursos y condiciones al cierre del 2016, cifra superior a la pasada.
Este avance responde a las mejorías necesarias en el campo, planteadas en los Lineamientos de la Política Económica y Social del Partido y la Revolución.
Como resultado, hoy crecen crecen las siembras, favorecidas por el funcionamiento de tractores y máquinas sembradoras, el riego y relaciones con otras entidades que enriquecen la producción.
En la Unidad Básica de Producción Cooperativa (UBPC) Juventud del Futuro sembraron 78 h de la especie Buenaventura, Delicia y Negro, y el administrador Agustín Godoy argumentó que la esencia radica en hacerlo todo en el primer ciclo, para garantizar el desarrollo del cultivo.
Unos 750 usufructuarios ocupan casi cuatro mil h de la Empresa Laguna Blanca, como fuerza que también produce; ellos se dedicaron con empeño a ese cultivo porque, además de que la tierra lo admite, es una necesidad para el país.
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