Santiago de Cuba, 8 jul.— Miembros de la delegación de Bonaire, a la cual estará dedicada la edición 37 del Festival del Caribe, el próximo año, anunciaron en esta ciudad que a esa cita vendrán unas 200 personas portadoras de las tradiciones y expresiones culturales más autóctonas.
En conferencia de prensa, la diputada de
esa nación, Rolanda Hellburg Makaai, agradeció esa designación en
nombre de su gobierno a los organizadores de la Fiesta del Fuego, y dijo
que será un placer para sus artistas e intelectuales intercambiar y
conocer de la riqueza cultural del área geográfica.
Destacó que su isla es pequeña, pero de gran belleza natural y cultural, donde hacen énfasis en fomentar la participación en el desarrollo económico, fortalecer la identidad del pueblo, y conservar y transformar las tradiciones, para que pervivan sobre todo entre los más jóvenes.
Señaló que es usual entre los habitantes de su pueblo decir que sin cosecha no hay fiesta, conscientes de la necesidad de trabajar duro antes de celebrar, y agregó que esa filosofía en la vida es muy útil para todos los empeños y objetivos.
Timoteo Silberie, director de Cultura de Bonaire, manifestó que de ahora en adelante no solo los conocerán por estar cerca de Curazao o de Venezuela, sino por ser una isla en el centro sur del Caribe con una cultura que vive y vibra.
Significó los esfuerzos que realizan por transmitir de generación en generación las herencias históricas y culturales de Bonaire, y consideró la Fiesta del Fuego del año venidero una importante oportunidad para reflejarlo y mostrar lo mejor.
Orlando Vergés, director de la Casa del Caribe, dijo que los bonaerenses recibieron con emoción la dedicatoria de la edición 37 del Festival, lo cual será beneficioso ya que esa tierra hermana necesita visualizar por sí misma, en el contexto cultural, las ideas emancipadoras que promueve el evento.
Destacó que su isla es pequeña, pero de gran belleza natural y cultural, donde hacen énfasis en fomentar la participación en el desarrollo económico, fortalecer la identidad del pueblo, y conservar y transformar las tradiciones, para que pervivan sobre todo entre los más jóvenes.
Señaló que es usual entre los habitantes de su pueblo decir que sin cosecha no hay fiesta, conscientes de la necesidad de trabajar duro antes de celebrar, y agregó que esa filosofía en la vida es muy útil para todos los empeños y objetivos.
Timoteo Silberie, director de Cultura de Bonaire, manifestó que de ahora en adelante no solo los conocerán por estar cerca de Curazao o de Venezuela, sino por ser una isla en el centro sur del Caribe con una cultura que vive y vibra.
Significó los esfuerzos que realizan por transmitir de generación en generación las herencias históricas y culturales de Bonaire, y consideró la Fiesta del Fuego del año venidero una importante oportunidad para reflejarlo y mostrar lo mejor.
Orlando Vergés, director de la Casa del Caribe, dijo que los bonaerenses recibieron con emoción la dedicatoria de la edición 37 del Festival, lo cual será beneficioso ya que esa tierra hermana necesita visualizar por sí misma, en el contexto cultural, las ideas emancipadoras que promueve el evento.
No hay comentarios:
Publicar un comentario