Plaza de la revolución

Plaza de la revolución
Plaza de la revolución

sábado, 20 de diciembre de 2014

Se despulpa mucho café en el Segundo Frente


CAF ACOPIOPor Mariano Aldana Villalón

Santiago de Cuba, 20 dic.— En su estructura productiva cafetalera, el municipio santiaguero de Segundo Frente tiene el privilegio de contar con las dos mayores despulpadoras de la provincia. Hoy enfrentan todo el proceso de beneficio luego de una eficiente rehabilitación.
Son ellas Mícara y Magueyal, ambas se transformaron como parte del programa inversionista ejecutado por la provincia con tecnología colombina para elevar sus rendimientos en el despulpe. De hecho ahora son ecológicas y muy superiores a las tradicionales.

Sus ventajas saltan ala vista de todos, pues protegen el medio ambiente al no generar líquidos residuales, caracterizados por la acidez y abundancia de sólidos orgánicos, y los recursos hidráulicos, al utilizar menos agua o reciclarla para lavar el grano.

Indiscutiblemente, la calidad en el beneficio es muy superior, según el comentario hecho  por Eudel Almira, director de la unidad Mícara. En su reseña, Almira significaba que con poca agua se desprende por el lavado el mucílago (sustancia vegetal viscosa) para entregarlo al ecado, al tiempo que una criba circular clasifica el grano.

Los bienes al entorno y a la purificación de ríos, arroyos y otras fuentes en esas serranías son positivos, porque solucionan los inconvenientes de los sistemas tradicionales de beneficio húmedo al aprovechar los subproductos (miel y pulpa), para evitar la contaminación de las aguas.

Georgina Ortiz, técnica de calidad de la Unidades Compactas de Beneficio Ecológico (UCBE), dijo que descartaron el alto consumo de agua y, consecuentemente, la elevada generación de residuos líquidos contaminantes (mucílago y aguas de lavado), los cuales eran desechados al aire libre.

"La despulpadora ecológica que funciona en Mícara consume entre cuatro y seis litros de agua por lata de café procesado (250 por hora), mientras las usuales empleaban hasta 50 litros", puntualizó Ortiz.

Otras ventajas son menos costo al beneficiar el grano, poca fuerza de trabajo en la operación del sistema y pequeña infraestructura para la instalación, que incluye además, la construcción de cajas de cáscaras, tanques sépticos y filtros biológicos.

Esa subestructura permite la descontaminación del agua empleada y el uso útil de los desechos sólidos como abono orgánico e integrar el efecto benefactor al entorno de las UCBE, que se distinguen por su color rojo y estar ubicadas en instalaciones de mampostería en segundos niveles.

El proceso inversionista contempla cambiar a UCBE todas las plantas tradicionales de Santiago de Cuba por el interés del gobierno cubano en avanzar hacia una caficultura ecológica, incrementar la calidad del grano y tener poco impacto negativo al medio ambiente.

No hay comentarios:

Publicar un comentario