Más de 50 mil metros cúbicos de madera corren el riesgo de perderse en las elevaciones de la Gran Piedra, perteneciente a la provincia de Santiago de Cuba, según directivos y trabajadores forestales.
Juan Carlos Ramírez, al frente de la Empresa Forestal Integral Gran Piedra-Baconao, explicó a la prensa que solo han podido recuperar nueve mil metros cúbicos de esos árboles derribados por el huracán Sandy, en octubre último.
Agregó que fueron afectadas mil 623 hectáreas, fundamentalmente de especies como pino y coníferas, lo que obliga a un esfuerzo adicional para reducir las pérdidas, situación que se agrava por la falta de recursos.
En tal sentido, señaló que trabajan con equipos muy obsoletos cuya explotación debe ser mesurada, aunque destacó que es necesario aprovechar mejor la jornada laboral y ganar en organización.
Hoy cuentan -dijo- con tres extractores de madera, pero próximamente esperan la llegada de otros dos que ayudarán a elevar la productividad y trasladar con mayor rapidez los troncos hacia los acopiaderos, donde tendrán mejores condiciones para su conservación.
En la zona conocida como las Marianas, cerca de la Gran Piedra, actualmente laboran dos brigadas extractoras de hombres que no piensan en el descanso y sí en asumir esa tarea tan importante como compleja.
Juan Deliz, trabajador forestal hace 20 años, afirmó que tiene la disposición de continuar con motosierra en mano los días que sean necesarios.
Doris Sierra, chofer de camión, significó que de no llegar a tiempo los recursos será muy difícil salvar al menos el 30 por ciento de la madera que se encuentra en esa zona.
Por suerte, según comentó Ramírez, comienza a verse una respuesta positiva, ya que serán enviados desde La Habana dos motores nuevos para camiones de carga, transporte indispensable en las montañas.
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