Autor : Caridad Franco Vega
La claridad matutina inunda la habitación, Ángel despierta
sobresaltado, aletargado aún, intuye que se ha quedado dormido, se ha
hecho tarde. Se despeja y entonces siente alivio, no hay de que
preocuparse desde hace un año no tiene obligaciones sociales y disfruta
de su jubilación.
Y es que más de 50 años de vida laboral le
crearon el buen habito de iniciar sus quehaceres bien temprano. Este
cubano tiene 70 años y hoy el deseo de seguir siendo útil a su familia y
a la sociedad lo mantiene activo. No se siente postergado, ni excluido.
Ha asumido, aunque con ciertas reservas que ya es un adulto mayor, y
sus roles han cambiado. Transmitir sus experiencias a los más jóvenes,
contribuir a la educación de sus nietos ahora forman parte de su día a
día.
Llegar a la tercera edad con salud es un privilegio. Cuba
tiene el mayor promedio de vida de Latinoamérica, la expectativa de vida
es de 78 años, mientras África registra la menor de todo el planeta,
según recientes cálculos del Centro de Estudios de Población y
Desarrollo de la Oficina Nacional de Estadísticas y de la Organización
Mundial de la Salud.
En Cuba, y en otras naciones desarrolladas
existe un envejecimiento de la población debido a la baja en la tasa de
natalidad, la mejora de la calidad y la esperanza de vida. En
correspondencia se crean programas que en su mayoría tienen el
propósito mejorar el nivel de vida de ese estrato de la población.
Existen
los subsidiados por el Estado y las personas de la tercera edad tienen
acceso a pensiones, garantías de salud y otros beneficios.
El día
del Adulto Mayor, que se celebra en todo el mundo el 1 de Octubre, y
que fue establecido desde 1990 por Naciones Unidas es motivo de festejos
en nuestro país. Momento ideal para también repasar cuanto se puede
hacer desde el seno de la familia hasta nivel social para hacerles la
vida más feliz a los ancianos.
Uno de los ejemplos del esfuerzo
que hace el Estado Cubano por la prolongación con calidad de la vida,
es la creación de las Cátedras Universitarias del Adulto Mayor.
En
el 2002 surgió este Programa Educativo, dedicado a la vejez, con el
marcado propósito de preparar a las personas incluidas en ese segmento
poblacional para el disfrute pleno en esta crucial etapa de sus vidas.
Entre las materias que se imparten se incluyen las relacionadas con el
medio ambiente, promoción de salud, cultura culinaria y envejecimiento.
La experiencia que ya cumplió una década muestra resultados muy
satisfactorios.
Poder vivir con dignidad, ser valorados, sin
tener en cuenta la contribución económica, brindar la posibilidad de
tener una vejez sana, feliz y útil a la sociedad deberá ser propósito
unánime de las naciones que aspiren a los beneficios de una vida
prolongada en un mundo cada vez más armónico y justo.
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