La primavera y el verano son las estaciones del año que sufragan las necesidades nutricionales del santiaguero con un grupo de alimentos de ponderadas propiedades, las frutas.
Una amplia gama de cosechas tienen lugar en estos meses al combinarse el período lluvioso y las altas temperaturas, lo que vuelve pródigos los campos de esta zona del país.
Temporada de mangos en todas sus variedades, tamarindos, nísperos, zapote, piña, además de guanábana, caimito, coco, frutabomba, marañón, guayaba y anón, garantizan que los frutos naturales y los productos obtenidos de su procesamiento lleguen a la población y las industrias de forma estable en esta época del año.
Bien pensada está la estrategia de acopio y comercialización de frutas para este año. Con base en estudios de estaciones pasadas se preveé la comercialización de una mayor cantidad de frutas.
La red de mercados especializados comienza a vivificar sus mostradores con distintas especies frutales que permiten que los clientes compren una mayor cantidad de frutas desde abril hasta finales septiembre.
Otras de las bondades de nuestras cosechas es la obtención de pulpas para mermeladas, jugos, compotas, néctares, tajadas en almíbar, conservas y cremas para helados. Industrias como la América Libre y las Fábricas las Santiaguera y de Compotas El Caney, pertenecientes a la Empresa de Conservas y Vegetales, están en temporada pico de producciones en molienda de mangos y tamarindos para potenciar la elaboración de compotas y conservas.
Otro sistema potenciado con frutas es la cadena de mini-industrias creadas en varias cooperativas de la provincia que dan proceso a los géneros acopiados en sus dominios, productos artesanales de gran demanda en los territorios. Tal es el caso de la pulpa de anón y tamarindo que se obtiene en la CPA Abel Santa María del Oasis, en el afamado Parque Baconao.
Un buen número de tradicionales carretoneros se suman a las estructuras creadas para la comercialización de frutas dentro de la ciudad, complementado con la venta de jugos naturales en los mercados de la provincia
En total hablamos de una cifra que debe superar las 17 000 toneladas de frutas en este año, según estimados de la delegación santiaguera del Ministerio de la Agricultura.
Es entonces esta temporada un momento exclusivo en el año para elevar el consumo de frutas y obtener los beneficios y el placer que nos provoca una jugosa tajada de mango o un refrescante batido de zapote. Queda de manos de las estructuras implicadas en las cosechas, transporte y comercialización dar todo de sí para que esta temporada de frutas sea más dulce que años anteriores.
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