Santiago de Cuba, 14 ago.— Conciertos, presentaciones de libros, exposiciones de artes plásticas, muestras teatrales, entre otras ofertas, disfrutan los santiagueros en la temporada estival.
La localidad cabecera, epicentro de todas esas actividades, acoge en el Cabildo Teatral Santiago, enclavado en la populosa calle Enramadas, la exposición Memoria y Teatro, que reverencia a la actriz Nancy Campos y al actor Dagoberto Gaínza por los 50 años de vida artística y la incondicional entrega al arte de las tablas.
Obras demostrativas del llamado teatro de relaciones, el cual tiene una tradición en Santiago de Cuba, se incluyen en la programación del Cabildo Teatral, que el cuatro de agosto último tuvo el privilegio de tener en sus predios a Campos y a Gaínza, en la interpretación de Dos viejos pánicos, obra emblemática del teatro cubano y escrita por Virgilio Piñera (1912-1979).
Nuevamente ambos artistas, quienes llevan unidos en la vida 47 años, derrocharon talento al encarnar la célebre creación piñeriana que pone la mirada en una tribulación que estremece hasta al más fuerte de los seres humanos: el miedo a la vejez y a la muerte.
El taller de escritura creativa infantil, promovido por el proyecto Promociones Literarias Claustrofobias, se ratifica notable y singular espacio cultural, y catalizador del apego a la lectura desde las más tempranas edades, lo cual es también propósito de la iniciativa El libro del mes, impulsada por el Instituto Cubano del Libro y de alcance nacional.
Inspiradora ha sido la acogida en la urbe santiaguera de El Ismaelillo, de José Martí, y El principito, de Antoine de Saint-Exupéry, textos cuyas presentaciones en el sistema de librerías y bibliotecas públicas marcan el comienzo de un trascendental empeño para incentivar el maravilloso hábito de leer, en especial en las nuevas generaciones.
Esta ciudad, considerada una de las más importantes plazas culturales en Cuba, y cuna de la trova, el son y el bolero, es habitual escenario de descargas musicales protagonizadas por artistas del patio, que en la temporada estival ofrecen múltiples expresiones de la riqueza sonora de este suroriental terruño.
La Casa de la Trova Pepe Sánchez, que el 28 de julio último cumplió su aniversario 50 de fundada, centros recreativos como Alegrémonos y La Pachanga, pertenecientes a la Empresa de Grabaciones y Ediciones Musicales, el Ranchón del Músico Los Compadres y el Iris Jazz Club, acogen atractivas propuestas sonoras, además de las exquisitas ofertas gastronómicas.
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