Las secuelas de Sandy se convirtieron en un paraíso para el agente transmisor del dengue. Con los daños a las infraestructuras de las viviendas, los depósitos al descubierto, unido al descuido familiar, el temible vector encontró el ambiente propicio para su tenaz reproducción.
Luego de dos meses del paso devastador de este huracán, los trabajadores de la salud, acrecientan la guerra sin cuartel contra el mosquito, para transformar el panorama epidemiológico en la provincia. Pero, nada se podría avanzar sin el autofocal familiar.
Las autoridades sanitarias en la provincia advierten sobre la importancia de mantener sellados los depósitos de agua, como principal tarea del autofocal.
Por otra parte, debido a que la infraestructura sanitaria de las ciudades no está diseñada para asumir los desechos que generan los animales de crianza, Jorge Miranda, Director de Salud Pública en la provincia Santiago de Cuba, advierte que existen leyes que prohíben la tenencia de animales de corral en zonas urbanas que son grandes portadores de gérmenes. Por este motivo, se cumplirán las regulaciones legales y sanitarias establecidas para quienes no respeten lo establecido.
Un ambiente agradable y limpio se traduce en salud. El bienestar de la comunidad está en nuestras propias manos.
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