El Día Internacional de los Monumentos se celebra el 18 de abril de cada año en todo el mundo con diferentes tipos de actividades
El Día Internacional de los Monumentos es una fecha en la que recordamos con regocijo todos esos sitios de altos valores históricos, culturales y medioambientales que a veces pasan inadvertidos a nuestro alrededor. Sin embargo debería ser también un momento para detenernos y reflexionar sobre lo que hacemos o deberíamos hacer para contribuir a su preservación.
En este empeño son varias las instituciones sociales que intervienen de manera directa, pues es sabido que es una tarea que requiere de manos especializadas. También existen proyectos vinculados a centros educacionales que dirigen su accionar a inculcar en las jóvenes generaciones, el apego a sitios o instituciones que poseen gran importancia para una comunidad, nación o incluso para toda la humanidad.
Pero a las acciones que me refiero en este comentario son a las individuales, a las espontáneas, a las del día a día.
Entre ellas no arrojar basuras, no dañar estructuras, no apropiarse
indebidamente de componentes de conjuntos monumentales por solo
mencionar las más elementales.Santiago de Cuba por ejemplo cuenta con más de una treintena de sitios clasificados como Monumentos Nacionales. Algunos de ellos se encuentran en plena urbe como edificaciones donde se enclavan oficinas estatales, centros educacionales, museos y centros culturales o de investigación. Es decir, son lugares que a pesar de constituir sitios monumentales mantienen su utilidad social. Y es ahí donde entramos nosotros.
Los monumentos nacionales son parte indisoluble de la identidad de un territorio, ellos han sido testigo o parte de momentos significativos para definición de una nación; incluso algunos por relevancia constituyen patrimonio de toda la humanidad. Entonces no sería desperdiciar nuestro tiempo el protegerlos y resguardarlos para el disfrute y orgullo de las venideras generaciones.
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