El presidente del Parlamento cubano, Ricardo Alarcón, llamó a los miembros de la Unión Nacional de Juristas de Cuba (UNJC) a intensificar esfuerzos por el pronto regreso a la isla de cinco antiterroristas presos en Estados Unidos.
Al intervenir en la clausura del VII Congreso de la UNJC en el capitalino Palacio de Convenciones, Alarcón expresó que los Cinco, como se le conoce internacinalmente, estarían de vuelta a casa si todos los juristas son capaces de cooperarar con el espíritu y voluntad con que muchos colegas mostraron a través de la historia de la nación.
Antonio Guerrero, Fernando González, Ramón Labañino, René González y Gerardo Hernández fueron condenados a exageradas penas por informar sobre planes de acciones violentas contra Cuba fraguados por grupos terroristas basados en territorio norteamericano.
Si queremos cumplir con nuestro deber en este momento
-dijo Alarcón a los delegados- tenemos que ser capaces de trabajar duro en este sentido en nuestro accionar cotidiano sin retórica alguna.
Debemos utilizar las llamadas nuevas tecnologías de la información, principalmente para llegar al pueblo estadounidense, sugirió el presidente de la Asamblea Nacional del Poder Popular de Cuba.
Previamente en una declaración, los expertos repudiaron la violación de los principios básicos y elementales de la justicia en el proceso de los Cinco, como la violación del debido proceso legal, y el derecho a un juicio justo con un jurado imparcial, el cual estuvo motivado por las presiones de la administración norteamericana.
Washington convirtió este caso simple en una venganza política, matizada por la ocultación y tergiversación de las evidencia, subraya el texto.
Criticaron el pago de estipendios y dádivas a los medios de comunicación de Miami para que publicaran mentiras y falacias sobre los Cinco bajo el calificativo de espías con el propósito de crear a un clima adverso y hostil hacia los acusados que influyera decisivamente en el veredicto del jurando y el fallo de la jueza.
Los juristas también rechazaron la arbitraria negativa del Washington al otorgamiento de visas a Olga Salanueva Y Adriana Pérez, esposas de René y Gerardo impedidas de visitar a sus cónyuges, lo que significa un castigo cruel e inhumano adicional para ellos, una violación de los más elementales derechos de los reclusos internacionalmente admitidos.
La UNJC llamó a jueces, abogados y a organizaciones de juristas de manera general a denunciar esa injusticia reforzada con el silencio de los grandes monopolios de la información que ocultan la verdad sobre el caso.
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