Santiago de Cuba, 23 nov.— Hace más de una década la población del municipio de Guamá, en la provincia de Santiago de Cuba, no había recibido tanta lluvia en casi seis horas, desde la noche del martes y la madrugada del miércoles, con 91 milímetros.
Daymara Torres, directora de la Unidad
Empresarial de Base Oficina de Correos en esa localidad, manifestó a la
ACN que fue muy beneficiosa para una serranía donde escasean las
precipitaciones y su economía es agrícola.
Muchas zonas de Chivirico, la cabecera, estaban recibiendo agua por pipas, por el estado deprimido de arroyos, arroyuelos, ríos y manantiales, que ahora se recuperan, acotó.
Como se sabe, dijo, los guamenses se abastecen de esas fuentes y por medios tradicionales, dada las características montañosas de su geografía.
En ella, precisó, hay 32 ríos y 22 arroyos y arroyuelos, que nacen en las montañas y sus aguas van al mar.
Mencionó, por ejemplo, el río La Calabaza, que ahora asombra verlo correr luego de años sin hacerlo, mientras el Sevilla interrumpió por varias horas el tránsito por carretera hacia Santiago de Cuba.
Rebeca Martínez, jefa de programación de la emisora Radio Coral, expresó que hace buen rato no veía tanta lluvia de golpe, aunque felizmente sin vientos.
Leonel Machado, especialista del Centro de Pronósticos en la provincia, detalló que sobre el Mar Caribe central se extiende una hondonada, que afecta la porción sur oriental de Cuba y ha provocado aguaceros desde el atardecer del martes, los cuales continuarán.
Además de los 91 milímetros de aguas precipitadas en Chivirico en ese corto tiempo, otra importante cantidad reportó la estación de la Universidad de Oriente, con 56, significativas para un mes de noviembre, comprendido en la etapa invernal.
Muchas zonas de Chivirico, la cabecera, estaban recibiendo agua por pipas, por el estado deprimido de arroyos, arroyuelos, ríos y manantiales, que ahora se recuperan, acotó.
Como se sabe, dijo, los guamenses se abastecen de esas fuentes y por medios tradicionales, dada las características montañosas de su geografía.
En ella, precisó, hay 32 ríos y 22 arroyos y arroyuelos, que nacen en las montañas y sus aguas van al mar.
Mencionó, por ejemplo, el río La Calabaza, que ahora asombra verlo correr luego de años sin hacerlo, mientras el Sevilla interrumpió por varias horas el tránsito por carretera hacia Santiago de Cuba.
Rebeca Martínez, jefa de programación de la emisora Radio Coral, expresó que hace buen rato no veía tanta lluvia de golpe, aunque felizmente sin vientos.
Leonel Machado, especialista del Centro de Pronósticos en la provincia, detalló que sobre el Mar Caribe central se extiende una hondonada, que afecta la porción sur oriental de Cuba y ha provocado aguaceros desde el atardecer del martes, los cuales continuarán.
Además de los 91 milímetros de aguas precipitadas en Chivirico en ese corto tiempo, otra importante cantidad reportó la estación de la Universidad de Oriente, con 56, significativas para un mes de noviembre, comprendido en la etapa invernal.
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