Plaza de la revolución

Plaza de la revolución
Plaza de la revolución

jueves, 28 de enero de 2016

Emplazarán escultura de Emilio Benavides Puentes conocido como el Diablo Rojo


Benavides Puentes conocido como el Diablo RojoPor Karina Soptomayor Otero

Santiago de Cuba, 28 ene.— En el Taller Cultural Luis Días Oduardo una escultura de dos metros de altura está en fase de modelado. Un equipo de realización dirigido por el artista Julio Cesar Carmenate revisa los detalles de esta pieza dedicada a Emilio Benavides Puentes, más conocido como el Diablo Rojo. En el Taller de Fundición artística de la Fundación Caguayo, la escultura se fundirá en bronce para luego ser emplazada en un parque ubicado en la calle Trocha.

Uno de los personajes populares más queridos en Santiago de Cuba vuelve del imaginario popular al Barro. Hace alrededor de un año los artistas planean darle movimiento a la pieza y atrapar el espíritu de quien fue Emilio Benavides Puentes, para esta ciudad: el Diablo Rojo.

Barro y cera de abeja se unen por ahora para darle visualidad a la obra que según uno de sus creadores será una escultura participativa. Al final se fundirá en bronce: "Después de esta fase que es el modelado en barro, la obra se desmontara en piezas que luego se vaciaran en bronce, porque esta será una pieza con mucha interacción con el público. Emilio era muy querido por los santiagueros y seguramente habrá muchos que quieran tocarle o tomarse una foto junto a la escultura, por eso pensamos en un material bien fuerte para que resista el clima", acoto Julio Cesar Carmenate, sin dejar de retocar el boceto en barro.

Emilio Benavides Puentes nació en esta ciudad a inicios del siglo pasado; desde pequeño le fascinó el teatro y el baile.

En Holguín le bautizaron el Diablo Rojo por sus coreografías y el color de sus vestiduras. Entre sus hazañas se cuenta la del recorrido desde la capital hasta Santiago en patines, un viaje que duro 7 días y 3 horas y que además no fue el único. A finales de los años 60 luego de jubilarse se le vio vestir de miliciano y cuidar a las niñas y los niños de esta ciudad; regulaba el tránsito para que los pequeños cruzaran sin peligro las calles.

José Rolando Montero y Amado Hechavarria junto a Julio Cesar Carmenate integran el equipo de realización de esta escultura que lleva casi un año de trabajos. El rociarla con agua, es uno de los procedimientos necesarios pues el barro debe permanecer húmedo para no retrasar las labores ni un segundo.

El cuatro de abril de este año, en el parquecito de Trocha y calle 3 se emplazará esta escultura de dos metros. El Diablo Rojo volverá a las calles santiagueras. Sera un regalo especial para los niños que ya crecieron y no le olvidaron, también para las nuevas generaciones.

No hay comentarios:

Publicar un comentario