El 14 de junio del siglo pasado nació en Argentina un hombre que trascendió a la nacionalidad y a la muerte. El Che Guevara es uno de los hijos de la Revolución Cubana y es símbolo en la lucha de los pueblos oprimidos de Latinoamérica.
Más allá del icono mundial vive el Che y con él, una suerte de filosofía guevarista de mortal sencillo que eligió el sacrificio por el bien mayor…
Sabemos que nació en Rosario, Argentina y en su lucha desde los pueblos oprimidos se le conoce como uno de los cubanos más admirados en América Latina. La historia señala su desaparición física 45 años atrás en Bolivia; pero al inspirar a tantos desde su condición de soldado y no de héroe, la carne y el hueso devinieron presencia constante en cada decisión ejemplar, en cada espíritu incorruptible, en toda lucha antiimperialista.
Che Guevara: el asma burlada por un defensor de la cultura del internacionalismo. Luchó por la libertad en Cuba y al amarla sangró al dejar raíces vitales de su existencia. Legó su energía contra lo imposible y con su sed de sabiduría y una sonrisa desde el alma provoca a todas las generaciones de cubanos y cubanas a ser como él, a seguir su vida de soñador y combatiente revolucionario
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