Jesús Gabriel es un niño sanluisero que tiene dos años y cinco meses de vida, ¡Había que ver la alegría con que recibió las goticas a favor de su vida!
Y es que la Campaña Nacional de Vacunación contra la Poliomielitis concluyó en todo el país con una primera etapa, el pasado 9 de marzo, e inició la segunda el 20 de abril hasta el viernes el 27.
La vez primera fueron vacunados los pequeños desde 30 días de nacidos hasta los dos años, 11 meses y 29 días; mientras que en esta segunda fase se les reactiva la dosis a estos niños y se les suministra a los de nueve años.
Aquí recibieron la dosis, dos gotas por vía oral, en la primera etapa 4mil 101 menores de tres años, igual cifra la recibe ahora, así como un total de 2mil 54 con nueve años.
En este municipio a lo largo de la campaña que ya acumula 51 años, se han empleado cerca de miles de dosis, ello significa que todos sus pobladores mayores de 60 años están inmunizados contra la polio, sin dudas, un logro para cualquier sistema de salud y que hoy Cuba exhibe.
Ahora, como en la anterior oportunidad, para hacer eficaz el proceso cinco puntos están habilitados.
¨Hay que ver con qué alegría acuden los pequeños con sus papás a recibir dosis de vida como garantía de un sistema que protege al ser humano desde los primeros años¨, apuntó a TV Santiago la Licenciada en enfermería Adela Neira Álvarez, asesora municipal en atención primaria de salud quien agregó al cierre de esta información que la vacunación se cumple a más del 75%, o sea, según lo planificado.
La poliomielitis es una enfermedad viral que produce desde parálisis permanente hasta la muerte, en épocas pasadas fueron muchas las familias cubanas que sufrieron la pérdida de seres queridos a consecuencia de la misma. Son numerosos los países que aún no han podido erradicarla.
Realmente la antipolio es de las vacunas no dolorosas. Recuerdo las primeras; eran unos pequeños caramelos que con gusto saboreábamos.
Bienvenidas son, por estos días entre las familias de San Luis, las gotas que garantizan vida a plenitud, sin espacios para que aniden tristezas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario