Por Mariano Aldana Villalón
Santiago de Cuba, 20 mar.— Eluvenio Fajardo Álvarez es de esos apicultores santiagueros que le gustan los desafíos. Desde su incorporación a la producción melífera, hace ya 10 años, ha tenido una progresión productiva que los distingue como uno de los más destacados en esta provincia.
Empezó acopiando miel convencional, pero ante el llamado de ir al cambio hacia la producción ecológica u orgánica, no titubeó a pesar del compromiso que entrañaba la nueva línea productiva.
Para que se tenga una idea clara de la importancia de la producción de miel ecológica, baste señalar que el néctar recolectado por las abejas, materia prima de la futura miel, tiene que estar libre de pesticidas, herbicidas o de otros producticos químicos. De ahí su gran aceptación en el mercado mundial.
Significaba Eluvenio Fajardo que existen diferencias notables entre la miel convencional y la miel ecológica. De esta última afirmaba que el sello que así lo certifica exige cumplir con una serie de requisitos.
Ellos son, explicaba el apicultor santiaguero la zona de ubicación de los colmenares o apiarios, la alimentación de las abejas, el tratamiento de plagas y enfermedades, el material de las colmenas y el método de extracción de la miel.
En la localidad palmera La Clarita, tiene Eluvenio desde hace 7 años unas 110 colmenas. Contaba que durante el pasado año se comprometió a entregar 5 toneladas y finalmente logró 6 coma 7 toneladas. Superó con creces la palabra empeñada.
Para este año, que ya transcurre por su tercer mes, el apicultor palmero se ha fijado alcanzar las 7 toneladas. Dice que no será nada fácil, pero nada lo detendrá hasta completar ese volumen.
Así, es la convicción que tiene Eluvenio Fajardo ante el nuevo desafío productivo. Venga periodista a finales de año para celebrar el cumplimiento del plan anual, Fueron sus palabras en la despedida.
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