Santiago de Cuba, 6 dic.— Para los constructores santiagueros conmemorar su día es mucho más que una celebración. los compromisos contraidos y ser consecuentes con las necesidades de la población los hacen permanecer a pie de obra.
Un año intenso en las labores recuperativas de las afectaciones ocasionadas por el huracán Sandy, mediante la ejecución de un amplio plan de construcción de viviendas constituyó un gran reto. A estas acciones, se suma la integración al programa “Santiago Arde”. Una vez más, se dispusieron a apoyar en la rehabilitación de otros territorios severamente afectados por el huracán Mathew y llegaron así a Baracoa, Maisí y cuanto sitio los necesitó.
Luego integraron brigadas para acompañar a hermanas provincias en la recuperación de sus territorios afectados por Irma, otro huracán que propició la confirmación de la unidad de esta gran familia.
Mucho queda por hacer a este ejército con tan altas misiones. En sus manos está, gran parte de la responsabilidad de mejorar la calidad del fondo habitacional de Santiago de Cuba, la entrega de nuevas viviendas para los damnificados e importantes aportes a la transaformación de una ciudad que sigue en el empeño de hacer realidad: la ciudad soñada.
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