Por Naylet Hernández PlanasSantiago de Cuba, 20 abr.— El Banco Popular de Ahorro promueve un proyecto de extensión de acceso a las tarjetas magnéticas, por las ventajas de este servicio, que incluye la instalación de nuevos cajeros automáticos.
Se trata de las tarjetas magnéticas.
Este medio de pago electrónico funciona como las cuentas de ahorro
tradicionales, incluso en lo referente a las tasas de interés, con la
ventaja de que ofrece las facilidades al propietario de la tarjeta
magnética de disponer de su dinero en cualquier momento y en cualquier
parte del territorio nacional.
Los beneficios del servicio de tarjetas magnéticas no solo se ciñen a la extracción asequible del dinero. Además posibilita por este medio pagar la cuenta del teléfono, hacer cambio de moneda nacional a la de la moneda convertible, CUC y viceversa, así como efectuar compras en la red de Tiendas de Recaudadoras de Divisas.
Atendiendo a esta amplia gama de ventajas, el Banco Popular de Ahorro en sus diferentes unidades de todo el país y por supuesto, en esta sur oriental provincia de Santiago de Cuba, desarrolla un proyecto de ampliación del servicio. El objetivo es poner las tarjetas magnéticas en manos no solo de los jubilados como hasta el momento, sino de los trabajadores por cuenta propia, de los cooperativistas no agropecuarios, las entidades para de pago de salarios y estímulos, y los cuenta ahorristas de maneta general.
Extender su uso permitiría descongestionar las sucursales bancarias y elevar la calidad de los servicios a disposición de los usuarios.
El incremento de los clientes potenciales supone necesariamente crear condiciones tecnológicas, por lo que a los 16 cajeros automáticos que actualmente tiene instalados el Banco Popular de Ahorro en Santiago de Cuba, se añadirán otros 14 en el primer semestre del año, que incluye algunos municipios como Palma Soriano y Contramaestre.
El acceso a las tarjetas magnéticas a través del Banco Popular de Ahorro, es inevitablemente una garantía para la persona, la institución y el desarrollo del país.
Los beneficios del servicio de tarjetas magnéticas no solo se ciñen a la extracción asequible del dinero. Además posibilita por este medio pagar la cuenta del teléfono, hacer cambio de moneda nacional a la de la moneda convertible, CUC y viceversa, así como efectuar compras en la red de Tiendas de Recaudadoras de Divisas.
Atendiendo a esta amplia gama de ventajas, el Banco Popular de Ahorro en sus diferentes unidades de todo el país y por supuesto, en esta sur oriental provincia de Santiago de Cuba, desarrolla un proyecto de ampliación del servicio. El objetivo es poner las tarjetas magnéticas en manos no solo de los jubilados como hasta el momento, sino de los trabajadores por cuenta propia, de los cooperativistas no agropecuarios, las entidades para de pago de salarios y estímulos, y los cuenta ahorristas de maneta general.
Extender su uso permitiría descongestionar las sucursales bancarias y elevar la calidad de los servicios a disposición de los usuarios.
El incremento de los clientes potenciales supone necesariamente crear condiciones tecnológicas, por lo que a los 16 cajeros automáticos que actualmente tiene instalados el Banco Popular de Ahorro en Santiago de Cuba, se añadirán otros 14 en el primer semestre del año, que incluye algunos municipios como Palma Soriano y Contramaestre.
El acceso a las tarjetas magnéticas a través del Banco Popular de Ahorro, es inevitablemente una garantía para la persona, la institución y el desarrollo del país.
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