
Por María Antonia Medina Téllez
Santiago
de Cuba, 1 may.— Como genuina expresión del respaldo de los obreros y
el pueblo a la Revolución y el Socialismo, definió hoy, María de los
Ángeles Cordero, secretaria general de la Central de Trabajadores de
Cuba (CTC) en esta provincia, la movilización de este Primero de Mayo.
Con la presencia de Miguel Díaz-Canel,
miembro del Buró Político del Partido Comunista de Cuba (PCC) y primer
vicepresidente de los Consejos de Estado y de Ministros, y Carmen Rosa
López, segunda secretaria de la CTC, la jornada empezó con el discurso
de la máxima dirigente sindical santiaguera.
Celebramos, dijo,
una fecha de reafirmación y compromiso con el cumplimiento de los
Lineamientos de la Política Económica y Social del Partido y la
Revolución, aprobados en el Sexto Congreso del PCC, porque los
trabajadores y su movimiento obrero son los protagonistas en el empeño
de perfeccionar el modelo de la economía en la nación.
La
diputada al Parlamento cubano reconoció la alegría del pueblo por tener
en estos festejos, tras largos años de injusto encierro en los Estados
Unidos, a los Cinco Héroes Gerardo, Ramón, Antonio, René y Fernando.
Exhortó,
asimismo, a impulsar con calidad las obras que se edifican por el medio
milenio de fundada la villa de Santiago de Cuba y el aniversario 62 del
asalto al cuartel Moncada, inversiones que mejorarán la calidad de vida
de la población, precisó.
En este sentido, insistió en la
necesidad de administrar con eficiencia el presupuesto y los ingresos,
como principal arma en el combate al delito, la corrupción y la
indisciplina social.
Convocamos, expresó, a aunar esfuerzos
para cumplir los planes en la producción de alimentos y en la industria,
con énfasis en los rubros que sustituyen importaciones.
La
disciplina, el trabajo con orden y eficiencia debe ser el principal
aporte de cada ciudadano, pues la continuidad de esta obra -alertó-
obedece a la capacidad que se tenga para avanzar y enfrentar retos.
Al
enarbolar las banderas del socialismo este Primero de Mayo, conscientes
de que la Patria y la Revolución están indisolublemente ligadas,
ratificó que como ayer, hoy y siempre, la unidad será la clave para
preservar la nación y las conquistas económicas y sociales.
Recordó
que los escenarios son diferentes, porque se dan pasos para el
restablecimiento de las relaciones diplomáticas con Estados Unidos, pero
sin ceder en nuestros principios, ya que el imperialismo mantiene su
esencia.
Esta multitudinaria manifestación, subrayó, es una
nueva ocasión para demandar el fin del criminal bloqueo económico,
comercial y financiero impuesto por el gobierno de EE.UU. hace más de 50
años, y para exigir el cierre de la ilegal base naval de Guantánamo.
Cordero
transmitió una felicitación a los miles de trabajadores cubanos que en
diversos países se consagran en el cumplimiento de hermosas misiones
internacionalistas, y exaltó a la brigada médica que en África
Occidental combatió la epidemia del Ébola.
Finalmente, a las
siete y nueve minutos de una nublada mañana, con las notas del himno
del proletariado mundial, dio inicio al desfile en el que participan más
de 320 mil trabajadores y su familia.