Por Noris Rosado FigueredoSantiago de Cuba, 15 abr.— Mirtha es una mujer de la tercera edad, pero aún sigue activa en su delegación de la Federación de Mujeres Cubanas, FMC, así como en el Comité de Defensa de la Revolución, CDR y en el núcleo de jubilados del Partido Comunista de Cuba.
Este 15 de abril, ella celebrará su
cumpleaños 80, junto a su familia, pero hoy recuerda, que un día como
hoy, pero del año 1961, no fue posible festejar sus 26 abriles. Temprano
en la mañana, los invasores, con aviones identificados con a bandera
cubana, bombardearon el aeropuerto Antonio Maceo, de Santiago de Cuba.
En las primeras horas, se desconocía lo que estaba sucediendo, pero luego su hermano y otros hombres de la familia, fueron movilizados, debido al ataque mercenario. El cumple se suspendió.
Había que combatir por la Revolución, por el pueblo. Este fue el preludio del ataque a Playa Girón. Lejos de amilanarse, ese día, esta santiaguera ganó política e ideológicamente. Se convirtió en una verdadera revolucionaria.
A partir de esa fecha, Mirtha Rosado Figueredose hizo federada, luego ingresó en los CDR y dejó de ser una empleada doméstica, para convertirse en técnica de laboratorio del hoy Combinado de Cereales Frank País, de esta ciudad sur oriental de la isla caribeña.
Ese día, esta mujer que peina canas, la lleva presente, por ser histórica para los cubanos. El 16 de abril, Fidel despedía a los compañeros caídos en la acción. Se produjo la invasión mercenaria y 72 horas después, fue la victoria, que al decir del líder histórico de la Revolución, fue la Primera Gran Derrota del Imperialismo en América, a sólo 90 millas de los Estados Unidos.
Este año, Mirtha y su familia, ahora más amplia, con hijos, nietas y biznieta, celebrarán su cumpleaños, más firmes y decididos. Sin invasores y porque ya son 80.
En las primeras horas, se desconocía lo que estaba sucediendo, pero luego su hermano y otros hombres de la familia, fueron movilizados, debido al ataque mercenario. El cumple se suspendió.
Había que combatir por la Revolución, por el pueblo. Este fue el preludio del ataque a Playa Girón. Lejos de amilanarse, ese día, esta santiaguera ganó política e ideológicamente. Se convirtió en una verdadera revolucionaria.
A partir de esa fecha, Mirtha Rosado Figueredose hizo federada, luego ingresó en los CDR y dejó de ser una empleada doméstica, para convertirse en técnica de laboratorio del hoy Combinado de Cereales Frank País, de esta ciudad sur oriental de la isla caribeña.
Ese día, esta mujer que peina canas, la lleva presente, por ser histórica para los cubanos. El 16 de abril, Fidel despedía a los compañeros caídos en la acción. Se produjo la invasión mercenaria y 72 horas después, fue la victoria, que al decir del líder histórico de la Revolución, fue la Primera Gran Derrota del Imperialismo en América, a sólo 90 millas de los Estados Unidos.
Este año, Mirtha y su familia, ahora más amplia, con hijos, nietas y biznieta, celebrarán su cumpleaños, más firmes y decididos. Sin invasores y porque ya son 80.
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