Por Rosalina Tamayo Arañó
Palma Soriano, Santiago de Cuba, 15 oct.— Esta frase se puede leer a la entrada de la Unidad Básica de Producción Cooperativa (UBPC) Niguabo 2 donde se constata que cuando hay liderazgo y compromiso de los trabajadores ninguna tarea es imposible.
Palma Soriano, Santiago de Cuba, 15 oct.— Esta frase se puede leer a la entrada de la Unidad Básica de Producción Cooperativa (UBPC) Niguabo 2 donde se constata que cuando hay liderazgo y compromiso de los trabajadores ninguna tarea es imposible.
Esta UBPC cuenta con dos lotes cañeros
que poseen 986 hectáreas de tierra. Según nos comentó Rubén Martínez
Vázquez, Jefe de producción; de caña tienen sembrado 983.06 hectáreas de
la gramínea y se estima para la zafra venidera unas 721 hectáreas que
pueden alcanzar una producción de 24 mil 439 toneladas de azúcar.
En saludo al día del trabajador azucarero inauguraron una casa de sombra que permite mejorar las condiciones de los trabajadores que descansan allí en horario de almuerzo, tienen juegos de mesa para recrearse y comenzar luego la dura tarea en horas de la tarde.
Oniquel
Quezada Fajardo, Jefe del Lote #1 nos habla del entusiasmo de los
trabajadores porque ven que su esfuerzo se corona con resultado y que
hay una atención para ellos. Nos comenta que aparejado al cultivo de la
caña de azúcar que es su principal producción tratan de cumplir el plan
emergente de alimentos que les permite autoabastecerse en gran medida
de boniato, yuca, quimbombó, maíz, ajonjolí, plátano y frijoles para
alimentación de los cooperativistas y sus familias.
Merece un reconocimiento aparte la conformación del módulo pecuario, que posee ganado mayor y menor. “La cría de conejos comenzó en junio con 7 reproductoras y 3 sementales y ya tenemos 50 ejemplares que pretendemos aumentar en esta otra nave que ahora se acondiciona”, así nos dice Agustín Robert Santana, Jefe de Producción de alimentos.
Que muy satisfecho nos muestra los ovejos y cerdos que también se multiplican.
La sequía les impuso un reto a los cooperativistas de Niguabo 2 que no se han amilanado ante la falta de agua.
“Mujeres y hombres estamos convencidos que solos podemos llegar más rápido, pero juntos llegamos más lejos”, por eso esto es una cooperativa donde con el esfuerzo colectivo y la voluntad de hacer, nada es imposible, acota orgulloso Ramón Labrada Dorado, el administrador que ya peina canas, pero desde niño tiene el corazón pegado a la tierra.
En saludo al día del trabajador azucarero inauguraron una casa de sombra que permite mejorar las condiciones de los trabajadores que descansan allí en horario de almuerzo, tienen juegos de mesa para recrearse y comenzar luego la dura tarea en horas de la tarde.
Oniquel
Quezada Fajardo, Jefe del Lote #1 nos habla del entusiasmo de los
trabajadores porque ven que su esfuerzo se corona con resultado y que
hay una atención para ellos. Nos comenta que aparejado al cultivo de la
caña de azúcar que es su principal producción tratan de cumplir el plan
emergente de alimentos que les permite autoabastecerse en gran medida
de boniato, yuca, quimbombó, maíz, ajonjolí, plátano y frijoles para
alimentación de los cooperativistas y sus familias.Merece un reconocimiento aparte la conformación del módulo pecuario, que posee ganado mayor y menor. “La cría de conejos comenzó en junio con 7 reproductoras y 3 sementales y ya tenemos 50 ejemplares que pretendemos aumentar en esta otra nave que ahora se acondiciona”, así nos dice Agustín Robert Santana, Jefe de Producción de alimentos.
Que muy satisfecho nos muestra los ovejos y cerdos que también se multiplican.
La sequía les impuso un reto a los cooperativistas de Niguabo 2 que no se han amilanado ante la falta de agua.
“Mujeres y hombres estamos convencidos que solos podemos llegar más rápido, pero juntos llegamos más lejos”, por eso esto es una cooperativa donde con el esfuerzo colectivo y la voluntad de hacer, nada es imposible, acota orgulloso Ramón Labrada Dorado, el administrador que ya peina canas, pero desde niño tiene el corazón pegado a la tierra.
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