Tomado de Radio Reloj
El 29 de octubre de 1897 fue aprobada la Constitución de La Yaya, en cumplimiento del mandato constitucional de Jimaguayú.La Carta Magna se estructuró en cinco títulos que contienen disposiciones sobre el territorio y la ciudadanía, los derechos individuales y políticos, el Gobierno de la República, la Asamblea de Representantes, y reserva el Título cinco a las disposiciones de carácter general.
En el primer Título se deja pendiente a una regulación posterior la división del territorio, además se establecen los requisitos para ser considerado ciudadanos cubanos. Igualmente, en ese mismo Título de la Constitución de La Yaya se reconoce el deber cívico de servir a la patria y por primera vez se implanta el servicio militar como deber obligatorio e irredimible de los ciudadanos cubanos.
Histórica constitución
En la Constitución de La Yaya se regulan los derechos civiles individuales como: habeas corpus, libertad postal, libertad religiosa, igualdad ante el impuesto y la libertad de enseñanza.
También incluye el derecho de petición, inviolabilidad de domicilio, sufragio universal, libertad de opinión y derecho de reunión y de asociación. La Carta Magna ratifica la incompatibilidad de ejercicio del cargo de Consejero con otros y aunque establece excepciones también reconoce prerrogativas inherentes al cargo de Consejero.
En cuanto a la Administración de Justicia dictamina dos jurisdicciones: una de lo criminal y otra de lo civil, cuya organización encarga a una ley posterior. Al igual que la Constitución que le antecede, la de La Yaya se refiere a las condiciones y procedimientos a seguir en caso de pactarse la paz con España.
Histórico hecho
Todavía no había concluido el período de vigencia de la Constitución de la Yaya, cuando a ésta no le prestaban atención. Con la intervención norteamericana en el conflicto hispano-cubano se creó una embarazosa situación jurídica en la Isla, por cuanto desde el primer momento los Estados Unidos comenzaron a dictar órdenes militares que perseguían asegurar las posiciones alcanzadas, beneficiando y estimulando, además, el capital inversionista y a la producción norteamericana en Cuba.
Ese desconocimiento del orden constitucional cubano, por parte de los estadounidenses fue fatal para la vida ciudadana e institucional. Por una parte se implantaban nuevos órganos de gobierno en la medida que dominaban la situación frente a los españoles, y por otra mantenían instituciones políticas y jurídicas implantadas en Cuba por el Gobierno español.
No hay comentarios:
Publicar un comentario