Santiago de Cuba, 22 feb.— La sinergia entre los artistas y la disquera en la creación, producción, distribución y el consumo es clave en el alcance de la Egrem como disquera que defiende hoy lo mejor de la música cubana.
El director de esa compañía, Mario Escalona, explicó que tras una etapa de rediseño, exploración, estudio y adaptación a las nuevas condiciones en el entorno de la música y con el apoyo de entes nacionales e internacionales, han logrado diagnósticos para definir las líneas estratégicas.
Aludió como un paso significativo el taller que se desarrolla hasta el día 23 en esta ciudad para el fortalecimiento de la cadena de valor de esa industria, con el auspicio del Ministerio de Cultura, la Organización de Naciones Unidas para el Desarrollo Industrial y la Agencia Coreana de Cooperación Internacional.
Resaltó esa gestión de una empresa estatal socialista como es la Egrem y la voluntad estatal por la producción discográfica, enfilada a la preservación y difusión de los más auténticos valores del patrimonio sonoro del país y aprovechando los nuevos canales que se abren con tecnologías modernas.
'Este reciente contrato con la Sony ATV va a tener un impacto muy importante para los creadores cubanos, que incluye a los compositores y a los herederos', dijo Escalona al referirse a ese vínculo establecido oficialmente el 24 de enero con esa multinacional.
En ningún momento se han cedido derechos, es una licencia por determinados años para garantizar que se distribuyan esas obras del pentagrama nacional por las grandes vías de difusión y promoción con las herramientas en boga en el mundo, ratificó el director de la Egrem.
Puso como ejemplo de ese empeño editorial la difusión multiplicada que tendrá la obra del popular cantor Carlos Puebla, cuyos beneficios serán para Cuba, sus descendientes y otras entidades que puedan comercializar esos productos.
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