Por Caridad Franco Vega
Santiago de Cuba, 6 feb.— La calidad y el rigor tienen que distinguir los procesos docentes en el sistema educativo cubano. Las diferentes modificaciones en el acceso a las universidades constituyen muestras de las favorables transformaciones que experimenta el sector. Las pruebas de ingreso se avecinan nuevamente y en el pre los estudios se intensifican.
Santiago de Cuba, 6 feb.— La calidad y el rigor tienen que distinguir los procesos docentes en el sistema educativo cubano. Las diferentes modificaciones en el acceso a las universidades constituyen muestras de las favorables transformaciones que experimenta el sector. Las pruebas de ingreso se avecinan nuevamente y en el pre los estudios se intensifican.
De recorrido por dos de los
preuniversitarios de la ciudad el Rafael María Mendive y el Cuqui Bosch,
varios estudiantes de grado doce expresaron sus consideraciones sobre
el estado actual del proceso.
En sentido general comentaron sentirse preparados y satisfechos con las clases que reciben, las orientaciones, los repasos y las tele clases. Y añaden que estudian individualmente y muchos asisten a un repasador particular.
También puntualizaron que las tele clases son importantes durante ellas cuentan con la presencia de un profesor que aclara las dudas, se interactúa y así también se aprende.
Los jóvenes valoran de positivo la orientación vocacional que han recibido y la utilidad de participar en las jornadas de puertas abiertas en las universidades, de forma tal que se les ofrece una visión de las carreras que se ofertan y pueden elegir mejor la especialidad que más les gusta o que les resulta afín.
En Santiago de Cuba existen 44 centros que tienen educación preuniversitaria con unos 4 mil 500 alumnos. La estrategia y las acciones de preparación comienzan desde el 10 grado, en 12 grado se hace intensiva. Pero en toda la etapa deben estar involucrados: alumnos, maestros, familias y directivos.
Santiago de Cuba es la segunda provincia del país en cuanto a matrícula universitaria. Elevar el rigor en la preparación de los estudiantes que realizan pruebas de ingreso es un imperativo de estos tiempos.
En sentido general comentaron sentirse preparados y satisfechos con las clases que reciben, las orientaciones, los repasos y las tele clases. Y añaden que estudian individualmente y muchos asisten a un repasador particular.
También puntualizaron que las tele clases son importantes durante ellas cuentan con la presencia de un profesor que aclara las dudas, se interactúa y así también se aprende.
Los jóvenes valoran de positivo la orientación vocacional que han recibido y la utilidad de participar en las jornadas de puertas abiertas en las universidades, de forma tal que se les ofrece una visión de las carreras que se ofertan y pueden elegir mejor la especialidad que más les gusta o que les resulta afín.
En Santiago de Cuba existen 44 centros que tienen educación preuniversitaria con unos 4 mil 500 alumnos. La estrategia y las acciones de preparación comienzan desde el 10 grado, en 12 grado se hace intensiva. Pero en toda la etapa deben estar involucrados: alumnos, maestros, familias y directivos.
Santiago de Cuba es la segunda provincia del país en cuanto a matrícula universitaria. Elevar el rigor en la preparación de los estudiantes que realizan pruebas de ingreso es un imperativo de estos tiempos.
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