Por Brita Garcia Alberteris
Santiago de Cuba, 21 mar.— Se hacen llamar los Pitufos de Pedro Marerro y así lo ponen en práctica los 12 niños que integran el equipo de fútbol categoría 9-10 años de Santiago de Cuba clasificados para el Torneo UNICEF a realizarse el próximo mes de abril en Cienfuegos.
Santiago de Cuba, 21 mar.— Se hacen llamar los Pitufos de Pedro Marerro y así lo ponen en práctica los 12 niños que integran el equipo de fútbol categoría 9-10 años de Santiago de Cuba clasificados para el Torneo UNICEF a realizarse el próximo mes de abril en Cienfuegos.
Todas las tardes entrenan en la
explanada de la Ciudad Escolar 26 de julio llenándola de risas y colores
pues los niños practican el deporte de su vida. El fútbol les abre el
camino hacia la amistad, la confraternidad y el desarrollo físico y
mental, premisas que la UNICEF en Cuba promueve con este campeonato de
balonpie.
El equipo esta integrado por infantes entre nueve y diez años que aman al más universal de los deportes y en el terreno lo manifiestan muy bien. Entre ellos destacan Diego Y Brian, y los delanteros estelares que siempre tiene un gol de zurda esperando para darle la victoria a su team.
También entrenan cuatro niñas, dos de ellas en la defensa, Nayelin y Tais juegan rudo y no permiten a los otros alcanzar los tres postes apoyando a su portero.
Aunque la grama no tiene todas las condiciones necesarias y eso afecta el total desarrollo de los pequeños, ellos reciben el apoyo de sus familias elemento esencial pues su felicidad les va en un corner, un golazo o una defensa bien planteada.
El equipo esta integrado por infantes entre nueve y diez años que aman al más universal de los deportes y en el terreno lo manifiestan muy bien. Entre ellos destacan Diego Y Brian, y los delanteros estelares que siempre tiene un gol de zurda esperando para darle la victoria a su team.
También entrenan cuatro niñas, dos de ellas en la defensa, Nayelin y Tais juegan rudo y no permiten a los otros alcanzar los tres postes apoyando a su portero.
Aunque la grama no tiene todas las condiciones necesarias y eso afecta el total desarrollo de los pequeños, ellos reciben el apoyo de sus familias elemento esencial pues su felicidad les va en un corner, un golazo o una defensa bien planteada.
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