Por Yulia Nela González Bazán
Dicen que para los que visitan por primera vez el
centro histórico de Santiago de Cuba son sus calles uno de los
atractivos de mayor impacto. Y es que desde la fundación misma de la
villa estas han sido estrechas, poco alineadas, accidentadas en su
mayoría, como si todo el tiempo se estuviera subiendo o bajando sin
importar el destino.
Hay incluso quienes se atreven hasta
afirmar que a su andar por estas calles deben parte de su encanto las
mujeres de esta tierra. Para los pintores santiagueros han sido siempre
motivo de inspiración, y no pocos son los que a ellas han dedicado sus
versos y tonadas.
Pero las calles de esta heroica ciudad también se distinguen por sus nombres. Denominaciones que en su mayoría recuerdan a patriotas y hombres notables de la historia de Cuba. Sin embargo en muchas perdura el nombre que de manera fortuita o inspirado en algún elemento presente en ella le atribuyeran sus primeros moradores. Tal es el caso de la hoy populosa Enramadas, cuyos elementos decorativos la marcaron para siempre.
Mundialmente conocida por su imponente escalinata es también la emblemática calle Padre Pico, llamada así en honor al noble sacerdote y patriota.
Otra de gran trascendencia es la calle Heredia, que según investigadores del tema fue la primera en Cuba en adoptar el nombre de un patriota a finales del siglo XIX, gracias a la gestión y empeño de un grupo de cubanos digno. Hoy reconocida además por la proliferación aquí de instituciones y actividades dedicadas al desarrollo de la cultura en territorio.
Sitio de homenaje perenne en Santiago de Cuba es también la antigua calle Providencia, hoy Los Maceo, por estar situada aquí la casa natal del Titán de Bronce.
Y es que son las calles de esta hermosa urbe reservorio vivo de historias Y leyendas que refuerzan los valores de un Santiago de Cuba que próximamente festejará con orgullo sus 5 siglos en el corazón de Cuba.
Pero las calles de esta heroica ciudad también se distinguen por sus nombres. Denominaciones que en su mayoría recuerdan a patriotas y hombres notables de la historia de Cuba. Sin embargo en muchas perdura el nombre que de manera fortuita o inspirado en algún elemento presente en ella le atribuyeran sus primeros moradores. Tal es el caso de la hoy populosa Enramadas, cuyos elementos decorativos la marcaron para siempre.
Mundialmente conocida por su imponente escalinata es también la emblemática calle Padre Pico, llamada así en honor al noble sacerdote y patriota.
Otra de gran trascendencia es la calle Heredia, que según investigadores del tema fue la primera en Cuba en adoptar el nombre de un patriota a finales del siglo XIX, gracias a la gestión y empeño de un grupo de cubanos digno. Hoy reconocida además por la proliferación aquí de instituciones y actividades dedicadas al desarrollo de la cultura en territorio.
Sitio de homenaje perenne en Santiago de Cuba es también la antigua calle Providencia, hoy Los Maceo, por estar situada aquí la casa natal del Titán de Bronce.
Y es que son las calles de esta hermosa urbe reservorio vivo de historias Y leyendas que refuerzan los valores de un Santiago de Cuba que próximamente festejará con orgullo sus 5 siglos en el corazón de Cuba.
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