Por Armando Fernández Marti
Santiago de Cuba 14 dic.— El 14 de diciembre de 2004, hace hoy 10 años, en el Palacio de la Revolución, en La Habana, los Presidentes de Venezuela, Hugo Chávez Frías, y de Cuba. Fidel Castro Ruz, firmaron el acta de constitución de lo que en ese momento se llamó Alternativa Bolivariana para las Américas (ALBA), que más tarde se convertiría en alianza de naciones latinoamericanas y caribeñas que integran hoy nueve países de área.
Santiago de Cuba 14 dic.— El 14 de diciembre de 2004, hace hoy 10 años, en el Palacio de la Revolución, en La Habana, los Presidentes de Venezuela, Hugo Chávez Frías, y de Cuba. Fidel Castro Ruz, firmaron el acta de constitución de lo que en ese momento se llamó Alternativa Bolivariana para las Américas (ALBA), que más tarde se convertiría en alianza de naciones latinoamericanas y caribeñas que integran hoy nueve países de área.
Nacía el ALBA como o había soñado el
Libertador Simón Bolívar: “Ver formar en América la más grande nación
del mundo, menos por su extensión y riquezas que por su libertad e
independencia”, una gigantesca nación que José Martí llamaría “Nuestra
América”, para diferenciarla de esa otra rapaz e imperial que siempre
consideró a los países de la región como su traspatio, soñando ahora
recuperar el terreno perdido.
El ALBA está integrada en estos momentos por Cuba, Venezuela, Antigua y Barbuda, Bolivia, Dominica, Ecuador, Nicaragua, Santa Lucía, y San Vicente y las Granadinas, los cuales ocupan una superficie de más de tres millones de kilómetros cuadrados, donde residen 74 millones de personas; poseen además importantes recursos naturales como petróleo, gas, aluminio, hierro, plomo, zinc, plata, litio, estaño y níquel, entre otros.
Dados los avances alcanzados en 2009, en una Cumbre Extraordinaria celebrada en Venezuela, se decidió nombrar a este bloque integracionista Alianza Bolivariana para los pueblos de nuestra América-Tratado de Comercio de los pueblos (ALBA-TCP), como reflejo de su fortalecimiento, tanto en el orden económico como social.
En lo económico, los países miembros de este mecanismo de integración regional en su conjunto han aumentado entre 2005 y 2012 el producto interno bruto de 248,3 miles de millones de dólares a 330,7 miles de millones de dólares lo que posibilitó en 2008 fundar el Banco del Alba con capital propio, para no depender de otros como el Banco Mundial, que más bien extorsiona a los países sobre todo, a los de menos recursos económicos y financieros.
En lo social, el ALBA-TCP acumula también importantes éxitos como la Operación Milagro que ha posibilitado recuperar la visión a más de tres millones de personas de América Latina y El Caribe, mientras que a través del programa de alfabetización cubano Yo sí Puedo, han aprendido a leer y a escribir unos tres millones 800 mil personas y se han declarado libre de analfabetismo las naciones que integran el bloque, mientras que se ha logrado reducir la mortalidad infantil en el área en 5,1 por ciento.
El deporte y la cultura son también sectores que resultaron beneficiados por este proyecto integracionista, habiéndose celebrado hasta el momento cuatro ediciones de los Juegos Deportivos del ALBA, en los que han participado más de 10 mil 500 atletas de 36 países en 45 disciplinas, en tanto que se creó el Fondo Cultural ALBA que otorga becas de investigación cultural, estimulando asimismo la creación artística y literaria a través de los Premios ALBA.
En un recuento de este tipo no es posible olvidar el aporte humanitario ofrecido por los países del ALBA-TCP a la nación caribeña de Haití tras el terremoto de enero de 2010, que le devastó, colaboración que desde entonces se mantiene tanto en la salud como en la recuperación material del hermano pueblo, aún sin ser este miembro del bloque integracionista. Hoy también los países del ALBA, sobre todo Cuba y Venezuela, colaboran en el combate contra el ébola en el África Occidental como muestra de la solidaridad con ese continente.
Este X Aniversario de la constitución del ALBA-TCP será celebrado este 14 de diciembre en La Habana con su XIII Cumbre al más alto nivel y donde se oficializará la entrada al bloque de Granada y San Cristóbal y Nieves para elevar a once el número de los miembros.
Mirar atrás en los 10 años transcurridos desde la constitución el 14 de diciembre de 2004 por Cuba y Venezuela del ALBA, no deja lugar a dudas de que aquel fue el primer paso de una integración sin precedentes que abría una nueva página en la historia de América Latina y el Caribe, un sueño de nuestros libertadores que ya no es una utopía, sino una hermosa realidad hacia la que mira todo el mundo por los principios humanistas y solidarios de las naciones de la región cuyo principal propósito, exento de mercantilismo y egoísmo es compartir lo que tienen y no dar lo que les sobra.
El ALBA está integrada en estos momentos por Cuba, Venezuela, Antigua y Barbuda, Bolivia, Dominica, Ecuador, Nicaragua, Santa Lucía, y San Vicente y las Granadinas, los cuales ocupan una superficie de más de tres millones de kilómetros cuadrados, donde residen 74 millones de personas; poseen además importantes recursos naturales como petróleo, gas, aluminio, hierro, plomo, zinc, plata, litio, estaño y níquel, entre otros.
Dados los avances alcanzados en 2009, en una Cumbre Extraordinaria celebrada en Venezuela, se decidió nombrar a este bloque integracionista Alianza Bolivariana para los pueblos de nuestra América-Tratado de Comercio de los pueblos (ALBA-TCP), como reflejo de su fortalecimiento, tanto en el orden económico como social.
En lo económico, los países miembros de este mecanismo de integración regional en su conjunto han aumentado entre 2005 y 2012 el producto interno bruto de 248,3 miles de millones de dólares a 330,7 miles de millones de dólares lo que posibilitó en 2008 fundar el Banco del Alba con capital propio, para no depender de otros como el Banco Mundial, que más bien extorsiona a los países sobre todo, a los de menos recursos económicos y financieros.
En lo social, el ALBA-TCP acumula también importantes éxitos como la Operación Milagro que ha posibilitado recuperar la visión a más de tres millones de personas de América Latina y El Caribe, mientras que a través del programa de alfabetización cubano Yo sí Puedo, han aprendido a leer y a escribir unos tres millones 800 mil personas y se han declarado libre de analfabetismo las naciones que integran el bloque, mientras que se ha logrado reducir la mortalidad infantil en el área en 5,1 por ciento.
El deporte y la cultura son también sectores que resultaron beneficiados por este proyecto integracionista, habiéndose celebrado hasta el momento cuatro ediciones de los Juegos Deportivos del ALBA, en los que han participado más de 10 mil 500 atletas de 36 países en 45 disciplinas, en tanto que se creó el Fondo Cultural ALBA que otorga becas de investigación cultural, estimulando asimismo la creación artística y literaria a través de los Premios ALBA.
En un recuento de este tipo no es posible olvidar el aporte humanitario ofrecido por los países del ALBA-TCP a la nación caribeña de Haití tras el terremoto de enero de 2010, que le devastó, colaboración que desde entonces se mantiene tanto en la salud como en la recuperación material del hermano pueblo, aún sin ser este miembro del bloque integracionista. Hoy también los países del ALBA, sobre todo Cuba y Venezuela, colaboran en el combate contra el ébola en el África Occidental como muestra de la solidaridad con ese continente.
Este X Aniversario de la constitución del ALBA-TCP será celebrado este 14 de diciembre en La Habana con su XIII Cumbre al más alto nivel y donde se oficializará la entrada al bloque de Granada y San Cristóbal y Nieves para elevar a once el número de los miembros.
Mirar atrás en los 10 años transcurridos desde la constitución el 14 de diciembre de 2004 por Cuba y Venezuela del ALBA, no deja lugar a dudas de que aquel fue el primer paso de una integración sin precedentes que abría una nueva página en la historia de América Latina y el Caribe, un sueño de nuestros libertadores que ya no es una utopía, sino una hermosa realidad hacia la que mira todo el mundo por los principios humanistas y solidarios de las naciones de la región cuyo principal propósito, exento de mercantilismo y egoísmo es compartir lo que tienen y no dar lo que les sobra.
No hay comentarios:
Publicar un comentario