Texto y Foto Eduardo Palomares CalderónSantiago de Cuba, 4 oct.— El Comandante de la Revolución Ramiro Valdés Menéndez, vicepresidente de los Consejos de Estado y de Ministros, constató la marcha del programa de ejecución de viviendas, las obras del sistema de Recursos Hidráulicos, el Vial Juan Gualberto Gómez-Flor Crombet, y otras importantes inversiones que tienen lugar en este territorio.
Ante la importancia que entraña la
construcción de más de 2 600 casas en el actual año, el también miembro
del Buró Político del Partido inició la jornada en el asentamiento que
con 250 moradas de tecnología Sandino, se levanta para damnificados del
huracán Sandy en la zona de Playa Mar Verde.
Interesado por la organización del trabajo, la atención a la fuerza procedente de Las Tunas, Guantánamo y esta ciudad, insistió en el cumplimiento del cronograma de terminación, “pues una obra tan necesaria tiene que ser como la Invasión que hicimos con Camilo y el Che: sin dormir, con los guardias atrás, pero pa’ lante”.
De manera especial indagó acerca de la calidad, y al detectar deficiencias en los elementos prefabricados se dirigió de inmediato a la planta que fabrica las piezas, donde tras criticar fuertemente las insuficiencias allí constatadas, señaló que “por respeto a quienes habitarán las viviendas se impone hacer las cosas bien”.
Totalmente diferente resultó el ambiente en el primero de los siete tramos, en que para su materialización está divido el vial que enlazará la Plaza Antonio Maceo y el cementerio Santa Ifigenia. Junto al personal de Etecsa, la Empresa Eléctrica y la ECOING-5, de La Habana, apoyaban brigadas de la comunidad.
En medio del saludo de los vecinos para Fidel y Raúl, Madelín Méndez Díaz, presidenta del Consejo Popular Mariana Grajales, explicó al Comandante de la Revolución la participación popular en la recogida de escombros, la ayuda al personal de la vivienda, y la atención a los constructores con agua, café o caldosa.
Ante la crítica situación provocada en el abasto de agua a esta ciudad por la sequía predominante en la cabecera del Río Cauto, Valdés Menéndez se dirigió junto a la presidenta del Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos, Inés María Chapman, a la presa Gota Blanca, localizada en el municipio de Palma Soriano.
En ese sitio, la delegada del INRH en el territorio, Janet Triana Cobo, detalló la experiencia aplicada para aliviar mediante una estación flotante de bombeo, el déficit de entrada de agua a esta ciudad y Palma Soriano, así como la aplicación de ciclos de abasto a la población.
“El agua que no tenemos es la que botamos con el nuevo acueducto”, dijo el Vicepresidente cubano, antes de que Norberto Marey, director de la Empresa de Acueducto y Alcantarillado Aguas Santiago, precisara que, efectivamente, a pesar de las medidas, el derroche persiste tanto en el sector residencial como en el estatal.
Acompañado en todo momento por el primer secretario del Partido en la provincia, Lázaro Expósito Canto, y el presidente del órgano de gobierno, Reinaldo García Zapata, Valdés Menéndez examinó también la marcha del alcantarillado de la barriada de San Pedrito, el avance de la carretera Granma, y las obras dedicadas al aniversario 62 de la gesta moncadista y los 500 años de esta villa.
Interesado por la organización del trabajo, la atención a la fuerza procedente de Las Tunas, Guantánamo y esta ciudad, insistió en el cumplimiento del cronograma de terminación, “pues una obra tan necesaria tiene que ser como la Invasión que hicimos con Camilo y el Che: sin dormir, con los guardias atrás, pero pa’ lante”.
De manera especial indagó acerca de la calidad, y al detectar deficiencias en los elementos prefabricados se dirigió de inmediato a la planta que fabrica las piezas, donde tras criticar fuertemente las insuficiencias allí constatadas, señaló que “por respeto a quienes habitarán las viviendas se impone hacer las cosas bien”.
Totalmente diferente resultó el ambiente en el primero de los siete tramos, en que para su materialización está divido el vial que enlazará la Plaza Antonio Maceo y el cementerio Santa Ifigenia. Junto al personal de Etecsa, la Empresa Eléctrica y la ECOING-5, de La Habana, apoyaban brigadas de la comunidad.
En medio del saludo de los vecinos para Fidel y Raúl, Madelín Méndez Díaz, presidenta del Consejo Popular Mariana Grajales, explicó al Comandante de la Revolución la participación popular en la recogida de escombros, la ayuda al personal de la vivienda, y la atención a los constructores con agua, café o caldosa.
Ante la crítica situación provocada en el abasto de agua a esta ciudad por la sequía predominante en la cabecera del Río Cauto, Valdés Menéndez se dirigió junto a la presidenta del Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos, Inés María Chapman, a la presa Gota Blanca, localizada en el municipio de Palma Soriano.
En ese sitio, la delegada del INRH en el territorio, Janet Triana Cobo, detalló la experiencia aplicada para aliviar mediante una estación flotante de bombeo, el déficit de entrada de agua a esta ciudad y Palma Soriano, así como la aplicación de ciclos de abasto a la población.
“El agua que no tenemos es la que botamos con el nuevo acueducto”, dijo el Vicepresidente cubano, antes de que Norberto Marey, director de la Empresa de Acueducto y Alcantarillado Aguas Santiago, precisara que, efectivamente, a pesar de las medidas, el derroche persiste tanto en el sector residencial como en el estatal.
Acompañado en todo momento por el primer secretario del Partido en la provincia, Lázaro Expósito Canto, y el presidente del órgano de gobierno, Reinaldo García Zapata, Valdés Menéndez examinó también la marcha del alcantarillado de la barriada de San Pedrito, el avance de la carretera Granma, y las obras dedicadas al aniversario 62 de la gesta moncadista y los 500 años de esta villa.
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