Por Naylet Hernández Blanc
Santiago de Cuba, 14 feb.— Mantener la vigencia de la música de la Década Prodigiosa es el propósito del Club "Huellas de la Década" de Santiago de Cuba. Por eso cada encuentro mensual se convierte en un espacio de amor.
En un ambiente colmado de amor e intimidad, febrero unió a la familia de la Década para una vez más disfrutar de la maravillosa música de los años 60, 70 y hasta los ochenta. Es un espacio que alienta el espíritu y la vida con el canto, el baile o simplemente escuchar.
Este club, pretende con sus acciones mantener viva la música de toda una época e integrar a la juventud para que no muera y se transmita de generación en generación.
Para sus miembros cada encuentro es atrapar la juventud en que se enamoraron, se casaron, disfrutaron, es un momento de unión por la música, de paz, armonía, un momento sencillamente mágico.
El club "Huellas de la Década" tiene en Santiago de Cuba a unos setenta miembros que junto a otros clubes del mismo tipo promueven y multiplican la música de una época que no muere.
En dos sitos sugerentes de la ciudad de Santiago de Cuba, "El Lido" y el restaurante "Garzón y K", se reúnen cada mes los amantes de la música de la década prodigiosa integrados por dos clubes, "Un rayo de sol" y "Huellas de la Década", quienes forman una sola familia por la música, la vida y la felicidad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario