Con una ceremonia militar y guardia de honor especial se rindió homenaje en Santiago de Cuba, a los patriotas Carlos Manuel de Céspedes y José Martí, en el aniversario 145 del inicio de las guerras libertarias en el siglo XIX.
Ante el mausoleo erigido al Héroe Nacional fueron colocadas ofrendas florales del líder histórico de la Revolución, Fidel Castro, el Presidente Raúl Castro, los Consejos de Estado y de Ministros y el pueblo de Cuba.
En tan significativa fecha, alumnos de la Escuela Militar Camilo Cienfuegos de Arroyo Arenas y la Escuela Interarmas de las FAR General Antonio Maceo, Orden Antonio Maceo, ambas de la capital cubana, participaron en la custodia de los restos del máximo organizador de la gesta de 1895.
Los jóvenes fueron seleccionados por la disciplina y resultados integrales en su preparación.
Por primera vez asistieron Yainelis Miranda y Yasiel Milián, del primer centro, quienes expresaron su orgullo por representar a los camilitos del país y vivir la experiencia de rendir tributo a esos dos próceres, en el cementerio Santa Ifigenia, Monumento Nacional.
A la segunda institución pertenecen Yesenia Paz y Leonel Escalona, en cuyas palabras destacaron la significación histórica de la fecha y el regocijo de hacer realidad el sueño de venir a Santiago de Cuba.
En la tumba de Carlos Manuel de Céspedes, el Padre de la Patria, también se realizó el homenaje a quien el 10 de octubre de 1868 dio la libertad a sus esclavos, en el ingenio La Demajagua, dando inicio a las luchas contra el colonialismo español.
La Banda de Música del Ejército Oriental interpretó piezas de contenido patriótico como La Rosa Blanca y El Mambí.
Se encontraban Lázaro Expósito Canto, miembro del Comité Central del Partido Comunista de Cuba y Primer Secretario en la provincia, y otros dirigentes del Gobierno, las FAR y las organizaciones de masas, así como también pioneros, jóvenes, combatientes de la Revolución y pueblo en general.
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