Por Marlene Montoya
El Museo Granjita Siboney, Monumento Nacional, cumplirá 48 años mañana martes con una valiosa labor de difusión de la historia del lugar, punto de partida de buena parte de los asaltantes al Cuartel Moncada en la madrugada del 26 de Julio de 1953.
Por la fecha sus trabajadores desarrollarán en la jornada un acto cultural, con interpretaciones musicales y poemas de contenido patriótico, y se recordará en especial al fundador de la instalación, el Comandante de la Revolución Juan Almeida Bosque (17 de febrero de 1927 - 11 de septiembre de 2009).
Yanet Alina Camejo, periodista del semanario Sierra Maestra, impartirá una conferencia sobre la presencia de ese revolucionario en Santiago de Cuba, y luego un material gráfico mostrará momentos de sus visitas al museo, ubicado en la carretera de Siboney, en las afueras de la ciudad.
Almeida Bosque fue uno de los combatientes en la acción, sufrió prisión, luego fue expedicionario del yate Granma en 1956, integrante del núcleo inicial del Ejército Rebelde, comandante guerrillero, y después del triunfo, dirigente con numerosas tareas cumplidas en favor de la Revolución.
Bajo su inspiración el lugar se convirtió en Museo que atesora exponentes, documentos y materiales sobre el asalto al Cuartel Moncada, en especial de ese sitio que tuvo un papel descollante durante los preparativos de la acción y en momentos posteriores.
En la jornada por el aniversario se reconocerán entidades que restauraron recientemente el local, como Servicios Comunales, las empresas Forestal Gran Piedra- Baconao y Pecuaria Caney, y alumnos y profesores de la Escuela Taller Ugo Luisi, de la Oficina del Conservador.
Vilma González Vives, especialista de la institución, especificó en la reparación del auto Oldsmobile 1950 que usó el segundo jefe de las acciones, Abel Santamaría, trabajó asumido por la empresa CubaTaxi.
Ese vehículo trasladó en la madrugada del 26 de Julio a combatientes de la acción contra el cuartel de la dictadura yobjetivos aledaños.
Conocida como Villa Blanca, esta casona campestre rodeada por una cerca de madera y con numerosos árboles, sirvió como sitio donde se escondieron armas, uniformes y autos utilizados en el ataque a la fortaleza, y dió cobijo a los jóvenes que dirigidos por Fidel Castro protagonizaron la acción que abrió una nueva etapa de luchas en Cuba.
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